En una entrevista de Iván Schargrodsky para El Destape, Ricardo Pignanelli, el Secretario General del Sindicato de Mecánicos y Afines del Transporte Automotor de la República Argentina (SMATA) planteó sus opiniones sobre las paritarias y la falta de mediación clara del gobierno. Para Pignanelli el gobierno no puso un techo a la negociación salarial, y que al menso en el caso de su gremio se consiguió “más o menos en lo que los compañeros estaban buscando”.
Además, sostuvo que si el gobierno hubiera anticipado la modificación en el tributo de ganancias, la negociación podría haber sido más moderada en los números demandados. “Creo que si se hubiera organizado todo esto hubiera traído menos discusión. Que desde Economía hubieran llamado a la CGT y le hubieran dicho qué iban a hacer con impuesto a las ganancias”. Aclaró que con el Ministerio de Economía “yo no tengo diálogo y a los muchachos de la CGT nunca se los convocó para contar qué se iba a hacer”.
Al mirar para atrás y adelante, Pignanelli afirmó que “el próximo Gobierno tiene que continuar. Este proyecto tiene que durar 100 años más, es la Argentina que queremos todos, que alguna vez gozaron nuestros viejos”. Y aclaró que para él “la continuidad es Scioli”. Para el sindicalista esto es así “porque creo que estuvo ocho años en una Provincia con muchos problemas y, si bien faltan muchas cosas por hacer, es el bastión del Gobierno central. Con todos los inconvenientes que tuvo la equilibro bien, tendió muchos puentes internos y está muy compenetrado con que éste es el modelo”.
Con respecto a Randazzo y la desconfianza de algunos kirchneristas con Scioli, el mecánico sostuvo que el gobernador “tiene una impronta que no es igual a la de Néstor y Cristina”, pero que “a mí no me vale una impronta para la tribuna”.
Sobre la candidatura de Mauricio Macri, Pignanelli se mostró tajante: “Para los trabajadores sería una mala noticia que Macri sea Presidente, pero no veo posibilidades que eso ocurra. Una cosa es la General Paz para acá y la otra es la Argentina profunda.
Cuestionado sobre una posible reunificación del movimiento obrero, Pignanelli consideró que “tiene que venir después de las generales”, y responsabilizó a Hugo Moyano de “la atomización del movimiento obrero, porque privilegió sus intereses y los de su gremio”.
A la hora del balance, rescató en particular las jubilaciones. “Muchos critican el valor: hoy en casi todos los hogares constituidos de viejitos hay dos jubilaciones. Es verdad, por ahí no llegamos a lo ideal, ¿pero sabés lo que significa para una mujer o un hombre grande tener autonomía?”. Y sobre la figura de la Presidenta fue claro: “Cristina ya quedó en el corazón de su pueblo. Lo que hizo con las mujeres es sólo comparable con lo que hizo Evita. Te puede gustar su impronta o no, lo que tenés que reconocer es que para hacer los cambios que hizo y devolver las conquistas que devolvió tuvo mucha valentía”. Y luego se corrigió: “huevos, tuvo mucho huevo”.