Tras la renuncia de Martín Guzmán al Ministerio de Economía, el Secretario Adjunto de ATE Nacional, Rodolfo Aguiar, evaluó que «esta decisión genera la oportunidad de encauzar el rumbo económico del país».
«Es llamativo que no se haya ido antes. Esto muestra que quiso dejar terminado el principal trabajo que tenía por encargo, que es acordar con el FMI aún en contra de los intereses del pueblo», apuntó el dirigente nacional.
La salida de Guzmán se da en un contexto de 60,7% de inflación interanual. Además, durante los primeros dos años de gestión, la suba de precios fue de 123%, el porcentaje más alto desde 1991.
En este marco, Aguiar insistió en que «quien lo reemplace debe ser capaz de priorizar las necesidades de la gente y tiene que ponerle fin al mayor flagelo que sufren los argentinos, que es la inflación».
Y detalló: «No sirve de nada que crezca la economía si no mejoran las condiciones de vida de todos. Hasta ahora sólo se han engrosado las ganancias de los dueños de grandes grupos económicos».
Cabe destacar que según el último informe del Indec, una familia tipo necesita $99.677 al mes para no ser pobre.
«Quien lo suceda debe mejorar salarios y jubilaciones, además de avanzar a un ingreso básico universal. Se necesita fortalecer la intervención del Estado en el mercado y ponerle límites a los formadores de precios», concluyó el adjunto de ATE.