La conducción nacional de la Central de Trabajadores de la Argentina Autónoma (CTA), que lidera Pablo Micheli, decidirá mañana la adhesión y participación a la jornada de paro general que impulsan para junio próximo las CGT Azopardo y Azul y Blanca y los gremios del transporte (CATT).
La CTA se pronunció por una huelga nacional de 36 horas, con movilización, aunque aseveró que acompañará «las decisiones finales que se adopten desde ambas centrales obreras y la Confederación Argentina de Trabajadores del Transporte».
Los dirigentes se reunirán a partir de las 18 del miércoles próximo en la sede sindical nacional de Lima 609, y participarán también los secretarios generales de todas las provincias.
Los sindicalistas evaluarán la posibilidad de que se realice una movilización hacia la Plaza de Mayo con las CGT Azopardo y Azul y Blanca y la Multisectorial en «absoluta unidad de acción».
La secretaría de Comunicación y Difusión indicó que la corriente ratificó hoy sus reclamos de «reapertura del Consejo del Salario, paritarias libres, 82 por ciento móvil jubilatorio, haber mínimo, vital y móvil de 12.000 pesos y eliminación de ganancias».
Luego del encuentro, los gremialistas ofrecerán una conferencia de prensa, señaló un comunicado de la corriente sindical.
Micheli explicó esta tarde que entre mañana y el jueves se reunirá con Hugo Moyano y Luis Barrionuevo -titulares de las CGT Azopardo y Azul y Blanca- para convenir fecha y modalidad de protesta.
Sin embargo, adelantó que el paro general nacional no se realizaría el 9 de junio -como adelantó esta mañana Juan Carlos Schmid (Dragado y Balizamiento)- sino el 10 u 11 de ese mes.