El diputado nacional y presidente del Partido Justicialista (PJ) bonaerense, Máximo Kirchner, mantuvo hoy una reunión con dirigentes gremiales. Se analizó el estado salarial de los trabajadores y la chance de otorgar una suma fija. Además se planteó la situación judicial y política de la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner.
El encuentro, que se desarrolló en la sede de la Federación Gráfica, contó con la presencia del ministro de Trabajo bonaerense, Walter Correa, y su par de Desarrollo de la Comunidad, Andrés Larroque.
Además del secretario general de la Federación Gráfica Bonaerense, Héctor Amichetti, anfitrión de la reunión, participaron de la actividad el titular de La Bancaria, Sergio Palazzo; el secretario General de la Unión Obrera Metalúrgica (UOM), Abel Furlán; de Suteba, Roberto Baradel; el titular de la CTA, Hugo Yasky; de Canillitas, Omar Plaini; la secretaria General de la Federación de Sindicatos de Trabajadores Judiciales, Vanesa Siley; y la secretaria General de Ctera, Sonia Alesso.
Se informó que durante el encuentro se analizó la situación del poder adquisitivo de los trabajadores y, en este sentido, hubo consenso en la necesidad de mejorar los ingresos.
En ese contexto, los participantes plantearon la necesidad de complementar las paritarias con una suma fija para recuperar poder adquisitivo y equilibrar el salario.
La idea de la suma fija, como había explicado ayer InfoGremiales, volvió a estar en el centro de la agenda del kirchnerismo como una herramienta que sirva para garantizar que los ingresos más bajos no vuelvan a perder la carrera contra la inflación,
Además, hubo críticas al accionar de la «mafia judicial» contra la vicepresidenta y la dirigencia sindical manifestó su deseo de que sea candidata en el 2023, según se informó.
En esa línea, acordaron seguir fortaleciendo al movimiento obrero organizado y, según detalla el comunicado, expresaron que «para defender el pleno derecho a elegir en democracia es necesario romper con la proscripción que la corporación judicial, a pedido de los grupos económicos, le imponen a la vicepresidenta».
Asimismo, plantearon que «el macrismo es cómplice de la situación que vive Cristina y actúa como un instrumento más del poder económico en Argentina».