Trabajadores de la zona Oeste del AMBA iniciaron una protesta esta mañana para reclamar medidas de seguridad luego del asesinato del chofer de la línea 620 Daniel Barrientos. El ministro de Seguridad bonaerense, Sergio Berni, se acercó a las protestas que tenían lugar en el partido de La Matanza y resultó herido a piedrazos, palazos y golpes de puño en medio de la furia de los trabajadores. La protesta se profundiza y sigue sumando líneas de colectivo.
La Unión Tranviarios Automotor (UTA) realizaba desde las 7.30 de hoy un paro de colectivos en la zona oeste del Gran Buenos Aires por el asesinato de un chofer de la línea 620, y advirtió que las medidas de protesta «se van a profundizar» si no se garantizan las condiciones mínimas de seguridad en el sector.
«La muerte de nuestro compañero se suma a una cantidad de episodios de inseguridad que vienen afectando a los choferes especialmente en todo el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA), por lo que la UTA dice ‘basta’ y anticipa que las medidas se van profundizar en tanto las autoridades no garanticen las condiciones mínimas de seguridad en el trabajo de todo nuestro sector», indicó el gremio en un comunicado firmado por el secretario general, Roberto Fernández.
El ministro de Seguridad bonaerense, Sergio Berni, resultó herido a piedrazos, palazos y golpes de puño al arribar a la protesta que un grupo de choferes de colectivos realizaba en la localidad bonaerense de Lomas de Mirador, partido de la Matanza.
Fuentes oficiales confirmaron a Télam que, tras la agresión -que se extendió por aproximadamente media hora-, Berni fue trasladado al hospital Churruca, ubicado en el barrio porteño de Parque Patricios, donde arribó en helicóptero con «conmoción cerebral, muchos golpes y cortes profundos en el cuero cabelludo y en el rostro», aunque aseguraron que no perdió el conocimiento en ningún momento.
Si bien el funcionario se resistía a concurrir al centro asistencial, los médicos le aconsejaron trasladarlo para que sea sometido a estudios, al igual que su secretario privado, quien también recibió muchos golpes durante el ataque de los manifestantes.
«Vine a hablar. Recién terminamos de detener a quien supuestamente es el autor… Estoy acá, primero porque entiendo el problema que están pasando todos los días. No hay nadie que venga a poner la cara y me banco la que sea. No salgo corriendo como los demás, estoy acá», dijo Berni mientras continuaban los insultos y le seguían arrojando elementos.
«¡Yo no me escondo y estoy acá! No hay soluciones mágicas, vengo a trabajar por ustedes», continuó mientras lo insultaban y los policías trataban de apartarlo de los agresores.
En tanto, once personas -ocho policías porteños y tres colectiveros-, resultaron heridas producto del enfrentamiento.
El chofer, identificado como Daniel Barrientos, fue asesinado durante la madrugada de un disparo en el pecho luego de que dos delincuentes intentaran robar en un colectivo en la localidad de Virrey del Pino, partido de La Matanza.
El hecho ocurrió cerca de las 4.30, cuando una unidad de la línea 620, de la empresa Nueva Idea, se encontraba circulando por la calle Bernardino Escribano y Cullen, en el barrio Vernazza de esa localidad del partido de La Matanza.
En el momento del intento de robo, uno de los pasajeros, que era policía, dio la voz de alto y uno de los asaltantes disparó hacia la víctima, informaron fuentes judiciales.
«Abrazamos a la familia de Daniel Barrientos, y nos ponemos a disposición tras este hecho que conmueve y que duele a toda la sociedad argentina», expresó la UTA.