La CGT realiza un acto por el Día Internacional de los Trabajadores bajo el lema «Estamos a tiempo», en el cual se insta a la dirigencia política, sindical y empresarial a alcanzar «un gran consenso político, económico y social». El documento conjunto que trascendió habla sobre el descontento como «terreno fértil» para la aparición de quienes pueden «poner en riesgo la vigencia de un sistema democrático pleno». También habla de un «nuevo contrato social» mundial y de un «futuro del trabajo» al que hay que integrarse «de manera moderna e inteligente», reduciendo la jornada laboral, entre otros temas.
El acto tiene lugar en las instalaciones situadas en Comodoro Rivadavia 1450 del barrio porteño de Núñez y va a centrarse en algunos ejes que fueron detallados en un documento firmado por el consejo directivo de la central de trabajadores días pasados.
En el documento se sostiene que la sociedad argentina «atraviesa una compleja crisis económica y social» e instan a alcanzar «un gran consenso político, económico y social» que promueva «el desarrollo, la producción y el trabajo como instrumentos hacia un horizonte de crecimiento con justicia social».
«Los índices de inflación y pobreza deben encabezar las prioridades para la adopción de medidas y acciones urgentes», remarcan en el texto.
Los dirigentes de la central obrera , según fuentes del sector, defenderán el actual modelo sindical, especialmente ante los embates de algunos sectores de la derecha.
A la vez, reiterarán su pedido de participación en las decisiones y en las listas de candidato del Frente de Todos, como históricamente lo han hecho en todos los turnos electorales, demandando su espacio en el peronismo.
Al acto llegaron representantes de UPCN (estatales), UTEDyC (entidades deportivas y civiles), Comercio, el gremio de informáticos AGC, SUTEP (peajes), La Bancaria. Entre los dirigentes presentes en el escenario ya están Héctor Daer, Carlos Acuña, Andrés Rodríguez, José Luis Lingieri, Jorge Sola, Hugo Moyano, Antonio Caló, Maia Volcovinsky, Julio Piumato y Facundo Moyano, quien adelantó a los medios su tono crítico: «Tengo buena relación con Sergio Massa pero la economía está estallada».
