Se trata del entendimiento firmado a fines de septiembre del año pasado tras 6 meses de conflicto. El Sindicato del Neumático pactó que los salarios debían ganarle por 10 puntos a la inflación del período. De julio de 2022 a junio de 2023 los sueldos aumentarán, por lo menos, el 127%.
Entrada la madrugada del 30 de septiembre del año pasado, tras 6 meses de negociaciones en el Ministerio de Trabajo, una toma de la cartera laboral y de un largo conflicto que amenazó con dejar sin neumáticos a las terminales automotrices y a todo el país, el Sindicato del Neumático y las empresas de la actividad firmaron la paritaria del sector.
En aquel momento se fijó un incremento salarial primigenio con una serie de porcentajes que llegaban al 63% hasta febrero, más un bono de 100 mil pesos para los operarios de Fate, Pirelli y Bridgestone.
Pero el gremio que comanda Alejandro Crespo, el único ligado al clasismo del universo del sector industrial de la argentina, fijó adicionalmente una cláusula que invocaba que los incrementos de sueldo debían quedar 10 puntos por encima de la inflación del período.
Hoy, a sólo 10 meses del inicio del ciclo paritario, por la activación de las cláusulas gatillo de indexación salarial sobre los meses de marzo y abril, los trabajadores del neumático ya percibieron una recomposición salarial del 88.7%. Con la proyección del REM, en 12 meses igualaría la inflación del 116, a lo que se le sumarían 10 puntos porcentuales formando un total de 126,7, que podría ser aún más alto dependiendo de la inflación de mayo y junio.
Esa cláusula se activará cuando se informe la inflación de mayo, tiene vigencia hasta el mes que viene cuando las partes deberán volverse a sentar en la mesa de negociación.
Se trata de un caso testigo en el mundo laboral de una paritaria que logró convertirse en una excepción en un universo generalizado de empate o pérdida del poder adquisitivo de los ingresos por acción de la inflación.