La ministra de Trabajo, Kelly Olmos, sostuvo que «padres bien remunerados y con protección social robusta favorece que los niños permanezcan en la escuela y en sus juegos», al dar una conferencia por el Día Mundial contra el Trabajo Infantil, cuya conmemoración es hoy, ante la Organización Internacional del Trabajo (OIT) en Suiza, desde donde inscribió «en la lucha por la justicia social» a esa problemática y llamó a combatir «la proyección intergeneracional de la pobreza».
Durante la 111° Conferencia Internacional del Trabajo que la OIT realiza en su sede de la ciudad suiza de Ginebra bajo el lema «Justicia Social para todos: cómo acabar con el trabajo infantil», Olmos reafirmó «el compromiso del Gobierno argentino con la lucha para alcanzar la erradicación definitiva del trabajo infantil para garantizar infancias con plenos derechos» y enfatizó que «los esfuerzos para erradicar el trabajo infantil se encuentran inmersos en la lucha por la justicia social», según un comunicado de prensa de la cartera de Trabajo.
La funcionaria destacó además que «la trayectoria de nuestro país en esta lucha permitió que Argentina obtuviera este año el estatus de «País Pionero» dentro de la Alianza 8.7, una asociación global inclusiva comprometida con la realización de un mundo libre de trabajo forzoso, esclavitud moderna, trata de personas y trabajo infantil».
En otro pasaje de su conferencia, Olmos puso de manifiesto «la labor conjunta del Estado nacional con las provincias, las organizaciones gremiales y de empleadores, en materia de fiscalización y promoción de programas indispensables para alcanzar ese objetivo», que obtuvo el reconocimiento, entre otros organismos , del Centro Internacional de Promoción de los Derechos Humanos, creado a partir de un acuerdo entre la Unesco y el Estado argentino.
La titular de la cartera de Trabajo ponderó los avances locales a través diversas políticas públicas, entre ellas mencionó a los programas Buena Cosecha, sobre cuidado de hijos e hijas de trabajadores rurales; Promotores Territoriales de Infancias Libres de Trabajo Infantil; y Fortalecimiento Federal para la promoción del Trabajo decente, que permite la inclusión laboral de los padres. También resaltó la plena vigencia de la legislación que obliga a los establecimientos productivos de más de 100 trabajadores y trabajadoras a proveer espacios de cuidado para sus hijas e hijos en la primera infancia.
«Hemos también desarrollado una importante trayectoria en materia de prevención y erradicación del trabajo infantil y de la protección del trabajo adolescente -aseguró Olmos-, pero reconocemos que nos queda, aún, un largo camino por recorrer».
En ese sentido, la ministra reconoció que, «a pesar de esos esfuerzos, en Argentina uno de cada 10 chicos de entre 5 y 15 años trabaja, y que este número se duplica en el ámbito rural». Sin embargo, ratificó el compromiso del Estado nacional de -dijo- «construir una sociedad donde los niños sean los únicos privilegiados».