El secretario general electo de ATE Rodolfo Aguiar evaluó que «la situación de los asalariados es grave» y reclamó que «aún siendo un monto escaso, debe implementarse en las provincias y municipios ya que podría funcionar como un alivio momentáneo».
El Secretario General electo de ATE, Rodolfo Aguiar, evaluó que la suma fija de $60.000 anunciada por el ministro de Economía, Sergio Massa, para trabajadores de la Administración Pública Nacional resulta «insuficiente para restituir el poder de compra perdido a partir de la devaluación» y disparó: “Estamos frente a un parche y no una decisión que permita mejorar las condiciones de vida de todos los trabajadores que se encuentran debajo de la línea de la pobreza”.
«No repara lo perdido hasta aquí por la inflación. Que sea por única vez, se pague en cuotas y se excluya a un universo importante de trabajadores, lo convierte en un fuerte condicionamiento para todas las negociaciones salariales. Reclamamos la urgente reapertura de las paritarias. Seguimos exigiendo una suma fija de carácter permanente que garantice que ningún estatal quede por debajo de la línea de la pobreza», indicó el dirigente en referencia a los condicionantes de la medida: a entregarse en los meses de septiembre y octubre, sólo para los ingresos menores a $400.000 y absorbible por las paritarias.
En este sentido, Aguiar consideró que «esta suma se verá rápidamente licuada frente a un proceso inflacionario en alza y precios de productos, bienes y servicios que no paran de aumentar».
Cabe destacar que la medida sólo alcanza a la administración pública nacional, por lo que Aguiar apuntó: «La situación de los asalariados es grave y el nivel de endeudamiento de las familias trabajadoras preocupante. Aunque se trate de un anuncio que no satisface las expectativas que nos habíamos generado, las provincias y los municipios deben instrumentarlo. Los empleados municipales están dentro de los más postergados y podría funcionar como un alivio momentáneo».