«Ese acuerdo debe ser la expresión de la voluntad de los trabajadores, el capital y la política para encauzar las expectativas de todos y avanzar en temas delicados», dijo Sergio Palazzo, titular de la Asociación Bancaria.
El dirigente sindical, cuya propuesta fue respaldada por el 42° Congreso Nacional Bancario, explicó que «el sindicalismo debe aprovechar las favorables circunstancias de la política para plantearse una nueva alianza estratégica con el Estado y aportar una agenda de gobierno orientada a un modelo de desarrollo con inclusión y justicia social para producir la reforma tributaria».
Palazzo añadió que «ello implica que la carga impositiva debe caer con un mayor peso en los capitales ociosos y especulativos y no a través de un tributo tan injusto como es el de ganancias».
«Es necesario para avanzar en una reforma del sistema financiero y evitar un mal endémico, aún no corregido, como la fuga de capitales, a las cuales algunos bancos prestan sus plataformas comerciales y operativas para facilitarlas», puntualizó.
El gremialista también subrayó que «el desafío para quien gobierne el país a partir de diciembre de este año debe ser planificar el crecimiento económico, provocar el desarrollo, sostener los logros obtenidos, solucionar los problemas irresueltos y afrontar los desafíos de un mundo cada vez más tecnificado y complejo, rescatando al ser humano como el principal eje de la economía».
«El hombre no es una mercancía del mercado laboral», afirmó Palazzo, quien sostuvo que «la política de derechos humanos no es un hecho del pasado sino que continuará siendo una línea estratégica permanente de la Asociación Bancaria».
Subrayó que transitar «con normalidad una nueva sucesión presidencial llena de alegría como hombres de la democracia, en especial cuando está aún fresca la crisis institucional de 2001», de la que «los trabajadores fueron víctimas por partida doble por los miles de puestos de empleo destruidos en el sistema financiero y por el crack del sistema, que no afrontaron los banqueros».
El sindicalista dijo que «se recuperó el valor de la política como instrumento vital para resolver los problemas del pueblo».
«La globalización y el capitalismo salvaje, prebendario y privatizador de los ’90 fueron acompañados por un cambio cultural en muchos compatriotas, alentados por los grandes multimedios y los comunicadores sociales al servicio del proceso de venta de activos de la Nación, esperando ser parte del negocio u obtener beneficios de las pautas publicitarias multinacionales», lo que hizo creer a muchos en proyectos individuales y no colectivos.
Para Palazzo, es preciso «no perder el rumbo en un año en el que los argentinos definirán el futuro de al menos la próxima década», en tanto reivindicó «la etapa de recuperación a partir de 2003».
En otro orden, Palazzo realzó el reciente acuerdo paritario bancario por ser «el duodécimo consecutivo y, en especial, porque el gremio firmó una cláusula por la que los trabajadores recibieron una compensación en las ganancias globales financieras».
El dirigente aseveró que «ello fue revolucionario para los bancarios y todos los trabajadores, ya que la Bancaria fue el primer gremio que logró acordar de forma fehaciente en el marco de un convenio colectivo para una actividad la participación en las ganancias patronales, llevando justicia al personal y haciendo cumplir el postergado artículo 14 bis de la Constitución», afirmó.