El ministerio de Trabajo bonaerense anunció que los desechos informáticos que generan serán reacondicionados y utilizados como material didáctico tecnológico. Se trata de una iniciativa de la Univesidad de La Plata llamada «Proyecto E Basura»
El ministerio de Trabajo de la provincia de Buenos Aires (MTPBA) le dará un destino sustentable para la salud y el ambiente al material eléctrico y electrónico inutilizados por distintas circunstancias y generado por las distintas dependencias que lo componen.
Desde la Dirección de Informática de la cartera laboral se pondrá en práctica el “Proyecto E Basura”, desarrollado por la Universidad Nacional de La Plata (UNLP), cuyo objetivo es disponer de manera correcta de los Residuos de Aparatos Eléctricos y Electrónicos (RAEE), que llegan a ser cientos de miles de toneladas anuales.
La iniciativa consiste en que los desechos tecnológicos producidos desde el Ministerio serán entregados a establecimientos para ser acondicionados de manera correcta y reutilizados en los Centros de Formación Laboral (CFL) para el aprendizaje, por ejemplo, de reparación en las localidades o regiones donde se encuentren las Delegaciones y Subdelegaciones Regionales.
“Este es un proyecto que tiene que ver con cómo se entiende la gestión política y la gestión del Estado y que es lo que nos impulsa todos los días nuestro ministro de Trabajo, Walter Correa, cómo articulamos entre las distintas áreas y cómo lo que para algunos puede ser algo residual o basura para otro puede ser un elemento de trabajo o de formación”, señaló el secretario Ejecutivo del Instituto Provincial de Formación Laboral (IPFL), Ezequiel Berrueco, encargado de la coordinación de los más de 200 CFLs que hay distribuidos en la Provincia.
Por su parte, el director de Informática del MTPBA, Guillermo Aguirre Bengoa, señaló que “cuando se levantó la veda de la pandemia y empezamos a relevar todas las Delegaciones, detectamos que había muchas oficinas atiborradas de todo este material que afecta no sólo el espacio sino también cuestiones de salubridad. Por eso celebramos que se tomen políticas serias en torno a este tipo de basura», mientras que el coordinador de la Región Educativa Nº6, Osvaldo Brest, hizo hincapié en que se trata de una “una excelente iniciativa poder recuperar todo este material, que para algunos es algo que molesta y para nosotros es un elemento vital. No hay un alumno que pueda aprender programación, sino tiene los materiales necesarios».
Junto a Brest, que se llevará 70 netbooks y 21 impresoras, las cuales serán readecuadas para el funcionamiento en los CFLs, estuvieron la directora de Gestión y Formación Laboral del IPFL, Liliana Meretz, coordinadores de otras regiones que recibirán parte de este tipo de basura para darle un destino sustentable.