El ministro de Economía, Luis Caputo, defendió hoy la fórmula de incremento de los haberes jubilatorios impulsada por el Gobierno, la cual aseguró representa una «recuperación del 64 por ciento», mientras que atacó a las jubilaciones para amas de casa y trabajadores sin registrar a quienes sus empleadores nunca les pagaron aportes. El ministro insistió con el planteo de oponer a jubilados contra jubilados y aseguró que «la verdadera licuación de las jubilaciones vino con las moratorias». Caputo dejó otra declaración alarmante: «La alternativa es seguir por el curso que vamos, ir con la gente, eventualmente sin la política».
El ministro se expresó dos días después que el Gobierno confirmara que que en abril actualizará las jubilaciones a través de un Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU), ante la imposibilidad de resolver la cuestión «mediante el tratamiento legislativo» porque el Congreso no hace lo que pretende Casa Rosada.
En un comunicado publicado en la red social X, la Oficina del Presidente Javier Milei ratificó su intención de otorgar dicho aumento, sujeto al índice de Precios al Consumidor (IPC), más un incremento adicional único del 12,5 por ciento para el mes de abril.
Caputo volvió a adjudicar al kirchnerismo la crisis en el sistema por haber incorporado a unos cuatro millones de jubilados a quienes sus empleadores no les habían realizado aportes.
«Hay una base de trabajadores que es la misma desde 2011. Estos, antes, con sus aportes soportaban a 2.000.000 de jubilados, ahora son 6.000.000 porque el kirchnerismo metió 4.000.000 sin los aportes. Las cuentas no dan», sostuvo en diálogo con el programa conducido por Luis Majul por La Nación Más.
El ministro sostuvo que en el Gobierno están «hartos» que usen el tema en la oposición, al señalar que la segunda variante propuesta «es malísima».
Efectivamente es cierto que hay una base de trabajadores aportantes que no alcanza a cubrir las jubilaciones. El gobierno anterior apuntó a solucionar este problema a través de aumentar paulatinamente el porcentaje de trabajadores registrados de la Población Económicamente Activa. Para este gobierno no queda claro cuál sería la solución porque con la recesión forzada y los despidos en el Estado que se cuentan por miles se pierden puestos de trabajo «en blanco» y aumenta el desempleo.
«Lo queremos solucionar, y lo usan políticamente, estamos hartos de que lo usen. Al 30% que dimos el mes pasado, le estamos sumando el 13% de febrero y un 12,5% de recomposición, sin tener en cuenta el bono. Por eso la nueva jubilación mínima va a ser $172.000. Tendrán una recomposición del 64%», agregó.
Consideró que al decidir aplicar el aumento de las jubilaciones por decreto «se terminó el jueguito político».
«Tomamos el toro por las astas, lo sacamos por DNU y a partir de ahora se ajusta mensualmente. El próximo ajuste les hubiera correspondido en junio. Desde abril se ajusta todos los meses», explicó.
En tanto, Caputo confió en que la inflación «continuará la tendencia a la baja» y aseguró que «ya está corriendo a niveles del un dígito en general», aunque por el momento el índice «no lo refleja». Ni el índice, ni los precios.
Además, se refirió a la reunión que mantuvo con las principales cadenas de supermercados. Habló de precios exagerados, y que deberían empezar a bajar, en parte, por abrir la importación a productos de la canasta básica.
«Cómo va a ser raro que me junte con los formadores de precios. Me preocupo y me ocupo de los precios. Me querían comparar con (el ex secretario de Comercio Guillermo) Moreno… hay una diferencia en cómo querés resolverlo. Si veo precios fuera de lo que deben ser me voy a preocupar, pero no voy a intervenir el Indec para hacerle creer a la gente que la inflación es más baja o poner Precios Cuidados. Los hacemos competir», contó.
El ministro no aclaró que los mismos supermercados tienen permisos de importación por lo que no van a competir consigo mismos.
«Lo que más le podemos garantizar es que no nos vamos a desviar del curso. Ni 10 centímetros. Nunca vi a alguien con tanta convicción», indicó sobre la administración del presidente Javier Milei.
Si bien admitió que lo mejor sería avanzar «con el apoyo del Congreso y los gobernadores», consideró que lo mejor es no «transar con la política» , para «no tener que aumentar el gasto para financiarlo con deuda o emisión».
«La alternativa es seguir por el curso que vamos, ir con la gente, eventualmente sin la política», evaluó. Qué significará eso.