Esta semana se filtró un documento que daba cuenta del destino de casi 3.300 millones de pesos para el pago de retiros voluntarios en Yacimientos Carboníferos Río Turbio (YCRT). Los trabajadores lo rechazan: «Sabemos que es un despido encubierto, lo mismo que se usó en los 90’s», plantean. Conflicto inminente.
A comienzos de esta semana se conoció que, la Secretaría de Empresas Públicas, dependiente de la Jefatura de Gabinete de Ministros de la Nación, autorizó desde el pasado 17 de mayo una partida específica para un plan de readecuación de nómina de trabadores, la cual se llevará adelante mediante el llamado a retitos voluntarios en los distintos sectores.
En este sentido, el plan de Retiros Voluntarios constaría de 3 cuotas de $1,094,500,000.00 para los meses de abril, mayo y junio, totalizando $3,283,500,000.00, para lo que la intervención ya cuenta con los fondos correspondientes a la cuota de abril. El rechazo de los trabajadores ha sido rotundo.
Quien se refirió al asunto fue el secretario general de la Junta Interna de Punta Loyola, Roy Staning, quien ratificó: «Obviamente estamos en contra, ya que sabemos que es un despido encubierto lo que se plantea, lo mismo que se usó en los 90´, cuando estuvo la concesión a Taselli, la que se dedicó a vaciar la empresa, y lo mismo se aplicó con la intervención de Omar Zeidan, durante el gobierno de Mauricio Macri».
En declaraciones a a TiempoSur, el referente sindical volvió a insistir en que «como junta interna estamos en contra de todo tipo de privatización, porque vemos que diferentes sectores gremiales y políticos impulsan un mal menor que sería una privatización mixta, pero nunca los trabajadores aceptamos el mal menor en la historia de la empresa».
Y continuó: «Esto no deja de ser una política entreguista donde se vacía la empresa igualmente y los retiros se darán igualmente, entonces no es la solución. Si vamos al caso durante el gobierno de Macri nos pedían entregar el CCT a cambio de los despidos como mal menor, pero enfrentamos los despidos, ganamos esa pelea y nos reincorporaron. O mal menor hubiera sido seguir soportando la concesión de Taselli en los 90´, pero luchamos y se consigue que la empresa vulva al Estado, y no se aceptó ningún mal menor. Hoy estamos en la misma situación y aparte hoy el mal menor implica avalar la ley bases, la cual no podemos avalar bajo ningún punto de vista».
Por último, ratificó que históricamente «los trabajadores votamos por una carboeléctrica estatal, bajo el control de los trabajadores, para poner a la empresa a producir, bajo condiciones que creemos que son las mejores para los laburantes, que somos los que defendimos la empresa todos estos años».