(Por Jorge Duarte @ludistas) Lisandro Catalán, flamante Secretario del interior, mantiene viejos contactos con el mundo sindical. Mano derecha de Guillermo Francos y exsciolista, compartió varios espacios en el pasado con conducciones gremiales. Tiene fluidos whatsapp con dirigentes y hasta es amigo personal de alguno.
Lisandro Catalán, flamante Secretario del interior, se convirtió en un nuevo puente entre la gestión de La Libertad Avanza y el mundo sindical. Es un vaso comunicante, de los que no abundan, en momentos en los que una porción del universo cegetista busca abrir caminos de diálogo para desescalar el conflicto con el Gobierno Nacional.
Catalán es un abogado de origen tucumano graduado en la Universidad Nacional de Tucumán. Más tarde hizo su Maestría en Gestión Pública de la Universidad Austral desde donde algunos reportan vínculos con el Opus Dei. Los que los conocen dicen que es un buen cuadro técnico.
Catalán trabajó con Guillermo Francos, ahora Jefe de Gabinete, en el Banco Provincia durante el primer mandato de Daniel Scioli como Gobernador de la Provincia de Buenos Aires, entre 2006 y 2007. De allí saltó a la Fundación Acordar, desde 2012 un think tank con algo de opacidad que, entre otros trabajos, colaboró en la campaña presidencial de 2015 del por entonces kirchnerista Scioli.
De esos años y los posteriores, en los que visitaba con Francos y el «Pichichi» sedes gremiales y comía asados en quinchos de sindicatos, le quedó una vinculación con buena parte de la dirigencia sindical. En especial con el ala más dialoguista de la CGT.
En el pasado reciente viene de ser el director del Registro Nacional de Reincidencia, que depende del Ministerio de Justicia. Ingresó a esa gestión con Marcela Losardo como ministra y se quedó a su salida. Después comenzó a trabajar, como su jefe Francos, en la candidatura de presidencial de Javier Milei.
Además, sostiene un vínculo de amistad personal con algunos dirigentes que trasciende lo político. También se habla de visitas a la sede Belgrano de la UOCRA, donde suelen cocinarse varias de las decisiones cegetistas.
Su rol como uno de los nexos subterráneos entre el Gobierno y la CGT se empezó a visibilizar con las reuniones que reveló InfoGremiales que mantenían en secreto miembros del sector más «menemista» de La Libertad Avanza con dirigentes gremiales. Cuando salieron a la luz empujaron el único encuentro formal con la central obrera.
De hecho, sin tener rango ministerial estuvo presente en el único cara a cara formal entre Azopardo y el mileismo en Casa Rosada. Como para ponerlo en registro estuvieron: Guillermo Francos, Nicolás Posse, Santiago Caputo y el propio Catalan.
A los dirigentes más cercanos les dejó trascender que el cargo que acaba de tomar en la gestión libertaria es provisorio y que cree que saldrá de ese lugar estratégico cuando se relance la gestión luego de la aprobación de la Ley Bases.