Un documento gremial firmado por el secretario de Prensa y Difusión de la organización, Sergio Kohan, aseveró que «la irregularidad fue constatada, ya que esos centros sanitarios abonan el salario de los profesionales bioquímicos dependientes con facturas de monotributo, lo que es totalmente ilegal».
«Ello es así desde que el profesional realiza actividad cotidiana en esos establecimientos, por lo que corresponde que lo haga bajo relación de dependencia, con recibo de sueldo y en el marco del convenio colectivo de trabajo 691/14, el único para bioquímicos».
Los representantes del sindicato indicaron que «el perjuicio no se comete solo a los trabajadores, privados de una relación laboral digna y estable y con recibo de sueldo, adicionales, vacaciones, antigüedad y licencias, sino que el Estado también es perjudicado a partir de la millonaria evasión de unos 5.400 centros que, en todo el territorio nacional, incumplen obligaciones laborales».
El Sindicato Argentino de Farmacéuticos y Bioquímicos (SAFyB) continuará las inspecciones en el marco de una campaña educativa para cesar con el trabajo no registrado y evitar de esa forma las multas de la autoridad competente, afirmó Kohan.
El SAFyB nuclea a los profesionales bioquímicos y farmacéuticos nacionales y explicó que el bioquímico es «un importante actor de la salud y de él dependen casi todos los estudios y diagnósticos». No es propietario de su laboratorio sino un profesional en relación de dependencia con derecho a un salario acorde con su formación y responsabilidad; a un sindicato propio que lo defienda y que se le respete la jefatura del quehacer en el laboratorio.
El bioquímico en relación de dependencia está comprendido de forma exclusiva en el convenio 691/14 del SAFYB y tiene asegurado un piso salarial de 23.098 pesos por 36 horas semanales de tareas.