(Por Pablo Maradei) Unos 1000 afiliados al APSEN (Asociación Profesional del Servicio Exterior de la Nación) votarán el 21 de octubre. Es la primera vez en muchos años que habrá dos listas. Se da en un contexto del fuerte impacto de Ganancias sobre sus salarios y en un clima de máxima tensión con la canciller, Diana Mondino.
En Cancillería el clima de trabajo es malo: con los haberes de agosto recientemente abonados se dedujo del salario el nuevo impuesto a los Ingresos Personales incluyendo julio. A tener en cuenta: el salario de este universo de trabajadores se compone, entre otros rubros, del «sueldo país»; que es lo que cobran cuando viven y trabajan en Argentina y que ya tributan Ganancias al 33%. Ahora bien, cuando son destinados al exterior al «sueldo país» se le suma el Adicional por Costo de Vida (ACV) que no venía tributando Ganancias y que desde este mes y por las reformas del Paquete Fiscal empezó a tributar.
Paréntesis. Los escalafones de la carrera diplomática son 7: secretarios (con tres categorías), cónsul, ministros de primera y de segunda y embajadores. Ejemplo numérico: un secretario de tercera que es el escalafón más bajo cobra en mano 2 millones de pesos. Ese valor cuando lo destinan al exterior se lo abonan en dólares al tipo de cambio oficial y se le suma el ACV según sea el costo de vida del país al que se lo destina. Este ítem no está regulado por Argentina, sino que se sigue un coeficiente que determina la ONU (Organización de Naciones Unidas). La quita por Ganancias por ambos conceptos golpea los ingresos hasta un 40%».
Al igual que el Gobierno desacredita en el discurso mediático los reclamos salariales de los pilotos aduciendo que cobran hasta 20 millones de pesos, en el caso de los diplomáticos al estar dolarizado el sueldo cuando están en el exterior suena tanto o más descalificativo en el debate público. Se defienden desde el Palacio San Martín: «Cuando nos trasladan, el diplomático pasa a ser el único sostén familiar por escolaridad de los hijos como así también pasa a ser el soporte económico del cónyuge que pierde su trabajo en la Argentina; además de pagar todo lo que es vivienda y salud para el grupo familiar».
El desafío electoral con un reclamo común de las dos listas. Con todos estos antecedentes, las listas «Unión por el SEN» y «Nuevo APSEN» se disputarán la renovación parcial del sindicato: las elecciones serán el 21 de octubre. APSEN está en una suerte de paréntesis. En octubre 2023 fue reelegido Gustavo Zlauvinen pero en febrero 2024 renunció a su cargo por un eventual traslado al exterior. En su lugar quedó Eduardo Michel quien está en retirada por jubilarse ni bien pase el mando a quien gane las elecciones de octubre.
De esta manera se da una suerte de no continuidad del oficialismo ya que hasta la lista cambió de nombre y de los 12 miembros del Consejo Directivo actual sólo continuarían 3; y ninguno es embajador. «Nuevo APSEN» es una lista que tiene su sustento electoral en las categorías más bajas de la carrera diplomática y que se sienten más afectados por la situación actual. Frente a la embestida del Gobierno no lograron armar una lista de unidad para enfrentar la crisis que ya los está golpeando; lo que debilita de facto la disputa que llevan por tema impuestos a los Ingresos Personales y otras cuestiones específicas del cuerpo.
Mientras tanto, se espera el pronunciamiento de la Justicia por la medida cautelar que presentó el APSEN en un contexto de varias actividades que ya consiguieron fallos favorables.