El diputado y referente de SMATA Mario «Paco» Manrique finalmente efectivizó su renuncia al cargo de secretario Gremial de la CGT. La decisión se cocinó a fuego lento y se expuso públicamente en distintas oportunidades, dado que, según dijo, no contaba con canales internos para realizar planteos. Sin embargo, en el texto de renuncia, el dirigente mecánico evitó críticas a la central y adujo falta de tiempo por acumulación de responsabilidades. La mira del sector más combativo de la CGT, del que Manrique forma parte, está puesta en la renovación de autoridades del año que viene.
El dirigente Adjunto de SMATA Mario “Paco” Manrique, actual Diputado Nacional, presentó formalmente su renuncia al cargo de Secretario Gremial de la CGT. En una carta dirigida al Consejo Directivo Nacional, Manrique explicó que la decisión se debe al «cúmulo de tareas y responsabilidades» que afronta actualmente en sus distintos roles, lo cual le impide desempeñar el puesto en la central «con la responsabilidad y dedicación que este merece».
La renuncia de Manrique, que se hizo efectiva este lunes, dejó el cargo de Secretario Gremial en manos de su co secretaria Gremial, referente también de SMATA. Se trata de Laura Gisele Lorenzo, quien asumirá interinamente las responsabilidades de este rol.
Este movimiento se da en un contexto de intensificación de la actividad sindical en Argentina. Las fracciones combativas de la CGT, junto con otros gremios, están redoblando sus esfuerzos para llevar adelante una estrategia de presión sobre el sector conocido como «los gordos» de la CGT. Según adelantó InfoGremiales, el objetivo de esta estrategia es que la protesta del sector de transporte prevista para el 30 de octubre se extienda hasta convertirse en un paro general.
Manrique, que también forma parte de un ala combativa dentro del SMATA y la CGT, fue una figura clave en estas tensiones internas de la central sindical, posicionándose del lado de aquellos que exigen una postura más activa en defensa de los derechos laborales y sociales.
El Consejo Directivo evaluará en las próximas semanas qué hacer con el interinato y si, con un reemplazo, cambiará o reforzará la línea de acción de la CGT frente a los conflictos de los trabajadores a nivel nacional.