El mandatario, acompañado por Peña y el ministro de Trabajo, Jorge Triaca, recibió a Hugo Moyano, Antonio Caló, Luis Barrionuevo, Armando Cavalieri, Gerardo Martínez, Juan Carlos Schmid y Gerónimo Venegas. Con buena recepción de los gremialistas, analizaron temas salariales, Ganancias, asignaciones familiares y hablaron de la expectativa salarial que el gobierno tiene para este año.
En conferencia de prensa tras el encuentro, el jefe de gabinete consideró que Gobierno y sindicalistas encontraron una «coincidencia casi total» y «se habló de (el impuesto a las) Ganacias», entre los temas principales.
En este sentido, anticipó que «la semana que viene o a más tardar la siguiente», presentarán un proyecto de modificación al impuesto a las Ganancias, en lo que fue el único anuncio tras la reunión.
«Tenemos claro que Ganancias es expresión de un problema más grande que es la inflación, un problema que altera todas las condiciones de las escalas salariales», explicó.
Respecto del tema paritarias, Peña dijo que el Gobierno maneja «una expectativa de inflación de entre 20 y 25 por ciento este año», blanqueando la idea del equipo económico de Cambiemos de conseguir unas paritarias «moderadas» para contener la inflación.
Además Peña consideró que «se debe hacer un repaso de cada sector, de cómo viene la actividad de años anteriores, cómo estaba y cómo está en este momento del año». Incluso, contó uno de los participantes del encuentro, que uno de los jefes sindicales definió cómo seguir la negociación. «Cada dirigente sabe dónde le aprieta el zapato», graficó.
Además de conseguir el aval gremial para su programa salarial, se charló sobre la deuda que el Estado tiene con las obras sociales. En la reunión quedaron en conseguir un nuevo encuentro con el ministro de Salud (Jorge Lemus) y el superintendente de Salud (Luis Scervino), según explicó Luis Barrionuevo.
El macrismo prometió también la universalización de las asignaciones familiares y se habló de la posibilidad de otorgar una rebaja del IVA en los productos de primera necesidad para apaciguar el impacto inflacionario que está deteriorando el salario.
«No nos vamos con soluciones pero nos vamos conformes», aseguró Caló al salir del La Rosada en una especie de sincericidio sobre el contenido del encuentro.