Era un secreto a voces que en cuestión de horas comenzaría el plan de ajuste de Aerolíneas Argentinas. Y así sucedió. La empresa estatal que dirige Isela Costantini oficializó ayer la eliminación de los 14 vuelos directos por semana entre Comodoro Rivadavia y Río Gallegos y disminuyó a la mitad la cantidad de partidas entre otras localidades importantes. Entre Neuquén y Comodoro se redujeron de 28 vuelos semanales a 14. Lo mismo ocurrió para las 28 conexiones entre las capitales Córdoba y Mendoza y los 14 de Mendoza a Neuquén.
El argumento de la empresa para eliminar los trayectos es la baja rentabilidad. Entre 2008 y 2015, Aerolíneas lanzó tres corredores (Federal Norte, Federal Sur y el Petrolero) con el objetivo de descentralizar los vuelos hacia la ciudad de Buenos Aires y potenciar económicamente cada una de las regiones.
Días atrás, la Asociación Argentina de Aeronavegantes (AAA) que nuclea a azafatas y comisarios de a bordo dispuso el estado de alerta ante «los rumores de ajuste del personal que trabaja en la línea de bandera Aerolíneas Argentinas».
Lo confirmó ayer el titular del gremio, Juan Pablo Brey, quien sostuvo que tiene información del ajuste que se viene. Se basan en un plan de negocios que la CEO del grupo presentará en los próximos días.
«Estaban hablando de dos mil personas o más, ya que hablan de un 30 por ciento de reducción de personal», dijo ayer Brey.
«Sabemos que la decisión de ajustar está tomada entonces pretendemos torcer esa decisión», añadió el gremialista, que también es secretario de Prensa de la Confederación Argentina de Trabajadores del Transporte (CATT).