La Unión Obrera Metalúrgica (UOM) tiene las conversaciones encaminadas para sumarse a la modalidad de paritarias semestrales que se está imponiendo este año. Desde el gremio que lidera Antonio Caló en principio buscaban un acuerdo largo, luego hablaron de paritarias trimestrales, pero ahora se habrían inclinado por la modalidad de las paritarias semestrales.
El sindicato le reclamó a las principales cámaras empresariales de la actividad un incrementos salarial por el primer semestre del año del 25 por ciento, pero ante la negativa patronal estarían cerca de cerrar un monto que va entre el 21 y el 22 por ciento.
Al igual que Comercio, SMATA y Utedyc, la UOM descomprimirá la situación de emergencia salarial impuesta por el alza generalizado de los precios y las tarifas con un acuerdo que cubra la primera parte del año y volverá a sentarse en la mesa de negociaciones en el segundo semestre.
Los metalúrgicos, que habían acordado un adelanto a cuenta de las negociaciones paritarias, además tienen sus negociaciones condicionadas por la creciente ola de despidos en el sector que ya hace mella y amenaza con destruir miles de puestos de trabajo.
“Estamos preocupados por los puestos de trabajo. Si el gobierno sigue con la apertura indiscriminada de las importaciones yo voy a tener este año entre 20.000 y 30.000 compañeros despedidos”, había alertado el propio Caló hace sólo unos días.
El sector metalúrgico atraviesa una fuerte incertidumbre, según Caló, por la fuerte caída de la demanda, el aumento en las tarifas energéticas y la apertura de las importaciones a manos del Gobierno nacional.