Los trabajadores del Hospital Posadas convocaron a un paro indeterminado desde ayer, coincidiendo en su inicio con la medida de fuerza de ATE por 48 horas. Los motivos son la inminencia de más de 600 despidos, según se rumorea en el hospital desde hace semanas; a lo que se suma una fuerte puja mediática y sindical.
El Gobierno Nacional anunció la semana pasada que revisará 2.035 contratos de empleados que ingresaron en el nosocomio durante el año pasado, la mitad de los cuales se efectivizaron en las últimas semanas de gestión del anterior director, Domingo Martín Latorraca, que renunció el 11 de diciembre.
La mañana del lunes 14 el Hospital Posadas amaneció prácticamente militarizado, con carros hidrantes y un enorme despliegue de la policía en las cercanías del nosocomio. Los uniformados de la Federal estaban ubicados en el tercer piso, lugar donde se encuentra la dirección, y algunos otros por el hall central.
A pesar de ello, hubo una asamblea autoconvocada que repudió el accionar de las autoridades, en medio de los crecientes rumores sobre la inminencia de 640 telegramas de despidos. Además, criticaron el accionar de UPCN, que habría negociado los despidos con las autoridades, y resolvieron el paro indeterminado.
Según Izquierda Diario, los despidos no afectarán las áreas de servicios asistenciales, sino a las áreas de vigilancia, administración y limpieza, lo cual dificultaría la unión de los trabajadores en rechazo a la medida.