Uber es una aplicación móvil que une a conductores particulares con pasajeros que requieren un vehículo. Comenzó a funcionar en Estados Unidos en 2009, y rápidamente se expandió por todo el mundo. Ante el anuncio de su desembarco en la Argentina, el gremio de taxistas se puso en pié de guerra.
El titular del gremio de conductores de taxis de la Ciudad de Buenos Aires, Omar Viviani, expresó ayer su rotundo rechazo al nuevo sistema y aseguró que no dejarán que se instale «bajo ningún concepto». «Vamos a elaborar un proyecto de ley para que se prohíba el ingreso de Uber en la Argentina, como pasó en Francia, en España y en otros países», prometió el gremialista.
Para reforzar su posición, Viviani señaló que la aplicación va en contra de la ley en muchos aspectos: «Uber incluso pone su tarifa, cuando en la realidad está regulada por el gobierno de la Ciudad y por distintos municipios. Su desembarco va a traer desocupación».
Además, anticipó que el próximo 6 de abril realizarán una asamblea en el gremio para presentar un proyecto contra Uber. Pero, para no perder tiempo, ayer mismo se declararon en «estado de alerta y movilización».
El sindicalista tiene motivos para sentirse tan confiado en su declaración de guerra. Lo cierto es que el macrismo, tanto a nivel nacional como de la Ciudad de Buenos Aires, le sostiene las espaldas.
En declaraciones a Radio Rivadavia, el gremialista aseguró que la administración macrista también se opone a la llegada de Uber: «El gobierno nacional está en contra de esto. De hecho, hay una ley en la Ciudad de Buenos Aires que prohíbe la instalación de cualquier sistema que no sea por radiotaxi», fundamentó.
Si bien funciona en numerosos países, en otros generó un fuerte conflicto, y en algunos, como Francia, fue prohibido por el gobierno. En nuestro país, la empresa Uber deberá gestionar un permiso administrativo antes de desembarcar.
Esa habilitación depende del gobierno de la Ciudad de Buenos Aires. Hoy el tema está en la órbita del secretario de Transporte, Juan José Méndez, que responde al ministro Guillermo Dietrich. Pero desde el gobierno porteño ya anunciaron que multarán los conductores que utilicen la aplicación.