En conversaciones con Radio del Plata, ayer el diputado y sindicalista mostró su preocupación ante la competencia desleal de la industria extranjera y china en particular.
Comentó sobre “pymes de entre 60 y 100 trabajadores, que hasta noviembre pagaban entre 100 y 120 mil pesos de luz, hoy están pagando entre 600 y 700 mil. Este combo del impacto tarifario de la energía eléctrica y la apertura indiscriminada de las importaciones, a nosotros nos está poniendo de rodillas. Hemos perdido 11.000 puestos de trabajo en la industria metalúrgica de diciembre a la fecha”.
Pero en particular alertó sobre la disputa en Córdoba acerca de la construcción del gasoducto que enfrentó al Grupo Techint con el gobierno local. “Con el argumento de que el grupo Techint es un monopolio y que tienen precios altos están con la intención de traer tubos de China para hacer el gasoducto de Córdoba. Y la verdad que uno puede entender que esto lo haga una empresa, pero que el propio Estado de Córdoba no esté velando por el trabajo argentino, por la industria nacional, nos tiene con un enojo tremendo. Porque si desde el propio Estado no te protegen, con la apertura indiscriminada va a ser mella en el trabajo argentino, cuál es el discurso que están implementando de decir que se van a generar puestos de trabajo, esto es una contradicción enorme”.
“El Estado dice ´por fin nos abrimos al mundo´, pero el mundo está destruyendo empleo. No hay demanda, no hay quien compre, están vendiendo. Hay un excedente de todo lo que es productor industrial y metal mecánico, de acero. Y entran a precio dumping. La industria argentina no puede competir. Esta realidad a la Argentina la va a poner de rodillas”.