Unas 50 mil personas se reunieron ayer en el cruce de las rutas 3 y 26, al sur de Comodoro Rivadavia, en reclamo de la «preservación de las fuentes de trabajo y el cumplimiento de los acuerdos laborales» en las empresas YPF, Panamerican, Tecpetrol y Sicpetrol, entre otras.
El conflicto se originó en enero último cuando las petroleras disminuyeron su actividad extractiva y exigieron compensaciones por los barriles de petróleo que se exportan, lo que puso en alerta a los sindicatos, en defensa de los puestos de trabajo.
El mes pasado el gobierno anunció que pagaría 1300 millones de dólares en bonos a YPF, PAE y Tecpetrol, empresas que prometieron reactivar la actividad de perforación en Chubut si se saldaba la deuda en incentivos a la producción que se arrastra desde mayo de 2015.
De hecho, como la situación no cambió, esta semana el gobernador Mario Das Neves intimó a través de una carta documento a Pan American Energy para que dé «cumplimiento inmediato” con el acuerdo firmado en Casa de Gobierno el pasado 11 de abril, en el que se comprometía a la reactivación y puesta en marcha de 10 equipos de perforación adicionales.
En este contexto, con el histórico apoyo del gobernador y del intendente de Comodoro Rivadavia, Carlos Linares, los petroleros salieron a las rutas y mantuvieron cortes en Caleta Olivia, Camping Gerald, PicoTruncado y Las Heras (rutas 12, 3 y 43).
La mayoría de las organizaciones gremiales, tanto del sector público como privado, acompaña el paro y las movilizaciones, con presencia en las rutas de dirigentes sindicales tanto de la CGT, como de la CTA, del comercio, el transporte, bancarios, camioneros, docentes, expendedores, Uocra y estatales.
El secretario general del Sindicato del Petróleo y Gas Privado de Chubut, Jorge Ávila, afirmó que la «situación social en la provincia es muy complicada» y declaró que el paro general tiene por único objetivo «la defensa de los puestos laborales», más allá de los conflictos particulares que enfrenta cada uno de los sindicatos.
En declaraciones a Radio del Plata, Ávila aseguró que las petroleras «no cumplieron con las inversiones prometidas» y detalló que la actividad laboral en Comodoro Rivadavia es mayoritariamente privada y que los trabajadores se encuentran «seriamente comprometidos» ante posibles despidos.