Trabajadores del Sindicato de Obreros y Empleados del Azúcar del Ingenio Ledesma (SOEAIL-CTA) estaban marchando esta mañana a la entrada al trapiche principal en la planta Ledesma en el marco de un paro por tiempo indeterminado por mejora salarial y condiciones de trabajo.
Allí fueron recibidos por la seguridad privada de la planta y por efectivos de la Gendarmería Nacional que desataron una brutal represión. Hay al menos 80 trabajadores heridos de balas de gomas, al borde de la asfixia por los gases lacrimógenos, mientras no permiten ingresar ambulancias para la atención de los trabajadores lastimados.
La CTA Autónoma emitió un comunicado de repudio, y señala que son 80 los trabajadores heridos. «La CTA Autónoma repudia y exige el cese inmediato de la represión de los trabajadores, que se permita la atención de los heridos y la urgente liberación de los compañeros y compañeras detenidas», manifestaron.
Pero esto es parte de una escalada represiva mayor a nivel provincial, que incluye la persecución de militantes de la organización Tupac Amaru. Son 13 los militantes de la organización que fueron detenidos, a casi seis meses del arresto de la líder del movimiento, Milagros Sala, diputada del Parlasur.
El Ingenio Ledesma, por su parte, cuenta con una pesada carga en términos de represión. De hecho falta una semana para un nuevo aniversario de La noche del apagón, que recuerda la represión y el apagón del 20 de julio de 1977, durante el cual fuerzas de Gendarmería Nacional y del Ejército secuestraron a 400 trabajadores y pobladores de las localidades de Calilegua, Libertador General San Martín y El Talar, de los cuales 33 permanecen todavía desaparecidas.