El ámbito gremial se suma a la lucha contra los aumentos de más del 400% de las tarifas de los servicios como el gas, luz, agua y transporte. Tras el logro judicial de la CTA de Hugo Yasky (consiguió que le concedieran un amparo en La Plata), los docentes decidieron acompañar la movilización de ayer en repudio a los aumentos.
Se sumaron entonces a la protesta del Obelisco, así como en varios barrios del Gran Buenos Aires. Alicia Navarro Palacios, miembro del Consejo Directivo del sindicato docente Ademys, señaló que “el impacto de los tarifazos en las escuelas es brutal. No solamente para los docentes, que tuvimos paritarias a la baja, que no alcanzan a cubrir el costo de la canasta básica familiar, sino para todas las familias trabajadoras. No alcanza para llegar a fin de mes, entre una inflación que en junio fue del 3,1% -según señaló el INDEC- y aumentos del transporte, el gas, la luz».
A su vez, Marilina Arias, también miembro del Consejo Directivo de Ademys, agregó que “hay mucha bronca en las escuelas por las medidas de ajuste del gobierno de Macri, y por eso desde el sindicato Ademys decidimos adherir a la convocatoria al Obelisco contra los tarifazos».
Por último, la dirigente de la izquierda afirmó que «la CGT y CTA le están dando una tremenda tregua al gobierno macrista», y reclamó que «llamen a un paro nacional contra el ajuste, contra los despidos, tarifazos y por la reapertura de las paritarias». Y remató: «Sabemos que la única forma de enfrentarlo es en las calles y con la movilización de las y los trabajadores”.