Los problemas de la industria textil no son nuevos, pero cada vez son más profundos. Según publica en su edición de hoy el diario regional del sur del conurbano, Infosur, la empresa Alpargatas suspendió en forma masiva a los trabajadores de la planta varelense con el argumento de la “caída del consumo”.
Según señalaron los propios trabajadores, desde la semana pasada la fábrica ubicada en Florencio Varela suspendió a 150 obreros. Sectores completos de la producción serán suspendidos 2 días por semana y la semana completa a fines de agosto. Claro que las suspensiones vienen con el riesgo de un posterior despido.
Alpargatas facturó el año pasado la friolera de 21.477 millones y en los últimos días anunció a sus trabajadores de las suspensiones escalonadas durante el mes de agosto y septiembre, lo que provoca un fuerte impacto en el bolsillo de los empleados ya que ven reducido su salario que ronda los 8 mil pesos mensuales.
Tanto Alpargatas como TN Platex, concentran el 44 % de las ventas del sector textil, ya que poseen campos de hilado en donde se produce la materia prima para toda la rama. En lo que van del año estas empresas, según comunicados oficiales, recuperaron 15 puntos por sobre la inflación y para el 2016 esperan un aumento del 20 % en la facturación.
De acuerdo con un informe del Centro de Economía Política Argentina (CEPA), el segundo semestre arrancó con una ola de despidos y suspensiones en el sector privado. Sólo en julio, hubo 14.149 ceses de contrato, 4.324 de los cuales, se produjeron en la industria.
Según la consultora, “desde diciembre pasado se destruyeron 194.244 puestos de trabajo”.
A una primera ola de despidos y suspensiones en el sector público y la construcción (diciembre-enero), le sigue una ola de despidos y suspensiones en el sector privado, particularmente en la industria, y que en estos dos últimos meses impacta en el sector de servicios, particularmente comercio y gastronómico.
El relevamiento presentado para el mes de julio arroja un sustancial aumento en la cantidad de despidos y suspensiones con 15.137 nuevos casos (entre el sector público y privado) -siendo que en junio se contabilizaron 11.721 casos-. Resalta en este aspecto, la incidencia del sector privado, que motorizó más del 93% de los despidos y suspensiones, siendo además central el peso de estas últimas sobre el total.
El informe presenta además un significativo incremento en los despidos de la industria (con 4.324 nuevos casos) y un marcado aumento de la cantidad de suspensiones también en el sector manufacturero, que ascendieron a 7.067 casos. Respecto del sector servicios, las cifras se han mantenido en los niveles del mes anterior, en valores elevados respecto de los relevamientos anteriores.
En el mes de julio los despidos se concentraron particularmente en 6 actividades, que explicaron el 74% de despidos y suspensiones. Se trata del sector textil, automotriz petrolero, frigorífico, electrónica y electrodoméstico y sector servicios -comercial-.
En el primer sector -textil- y como resultado de la apertura de importaciones hubo 2.520 suspensiones y 111 despidos sólo en el mes de julio. En esta línea, resultan sugestivos algunos casos de llano incumplimiento del acuerdo firmado entre grupos empresarios y el gobierno nacional por 6 meses, para evitar despidos. El caso Alpargatas es uno de ellos.