El Comité Central Confederal (CCC) de la CGT facultó al flamante consejo directivo de la central obrera a adoptar todas «las medidas de fuerza que sean necesarias cuando lo considere oportuno», por lo que se impuso la posición de las organizaciones gremiales que aún procuran un acuerdo con el gobierno nacional a través del diálogo.
Luego de algo más de tres movidas horas de deliberaciones en el Salón Felipe Vallese de la CGT, en Azopardo al 800 y, como estaba previsto, el Confederal facultó al triunvirato integrado por Juan Carlos Schmid, Héctor Daer y Carlos Acuña a adoptar todas «las acciones necesarias cuando la conducción lo considere oportuno».
En el encuentro participaron 225 sindicatos, 180 secretarios generales y 253 congresales, según el secretario de Prensa, Jorge Sola, quien en una insólita decisión prohibió el ingreso de los medios de prensa al Vallese para que cubriesen las deliberaciones.
Fue la primera vez que los periodistas debieron aguardar afuera del recinto de debate, luego de la decisión de Sola, flamante secretario de Prensa y segunda o tercera línea del gremio del Seguro, quien decidió además no ofrecer entrevistas personales.
En una conferencia de prensa, los integrantes del triunvirato aseguraron que durante las deliberaciones hubo «posturas diversas y un profundo debate», e informaron que se eligió el Comité Arbitral, que dirime los conflictos intersindicales.
Daer sostuvo que «se debatió la realidad política y económica por la que atraviesan los trabajadores a partir de un informe de Schmid», en tanto señaló que hablaron más de 30 congresales en «un debate enriquecedor» y se coincidió totalmente en el diagnóstico.
«El gobierno decidió transferir grandes recursos a varios sectores concentrados y aumentó las tarifas de los servicios, mientras cayó el salario y continúa el proceso inflacionario, que deterioró el poder adquisitivo de los trabajadores y jubilados y maltrató la economía de quienes cumplen tareas en la informalidad», dijo Daer.