En una conferencia de prensa conjunta, los dirigentes de sindicatos docentes de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires reclamaron al Ejecutivo porteño «una recomposición salarial del diez por ciento para todas las categorías, niveles y modalidades y de manera proporcional, remunerativa y bonificable», según «el propio Indice de Precios al Consumidor, que demostró esa pérdida del poder adquisitivo», dijo Eduardo López, de la Unión de Trabajadores de la Educación (UTE).
«Hace nueve años, el presupuesto educativo era del 30 por ciento; en 2015 del 21 y, ahora, fue reducido al 18 por ciento. Así no hay manera de abonar los salarios y quedarán chicos afuera por falta de vacantes», detalló López esta mañana ante la prensa.
En el encuentro participaron, además, representantes de la Confederación de Trabajadores de la Educación (Ctera), la Unión Docentes Argentinos (UDA), el Sindicato Argentino de Docentes Privados (Sadop) y el Centro de Profesores, entre otros.
La UTE se movilizará el próximo jueves hacia la Legislatura porteña, en Perú al 100, para acompañar a las familias que «este año no lograron obtener vacantes en las escuelas públicas» y para exigir más presupuesto para «una permanente capacitación».
«Los conocimientos no vencen. Tampoco hay un techo para aprender. Esa formación debe ser constante y estar a cargo del Estado. Hay que dejar de desfinanciar a la escuela de maestros para no caer en el mercado de las trasnacionales de capacitación», concluyó.
Por su parte, los docentes privados que conduce Alejandra López rechazaron «las dilaciones y la ausencia de diálogo de la ministro de Educación, Soledad Acuña, y del Jefe de Gobierno, Horacio Rodríguez Larreta», y exigieron «la convocatoria a la mesa de condiciones salariales y laborales para aplicar el monitoreo y cotejar de esa manera los datos inflacionarios con los haberes».
«Los ingresos sufrieron hasta octubre último un deterioro de más del 10 por ciento (11,5 según la CGT) y, lamentablemente, las perspectivas hasta fin de año empeoran la situación», dijo López.