La decisión de abandonar la planta fue tomada por unos 30 empleados durante una asamblea en la que fueron notificados por personal de Infantería y Gendarmería que debían retirarse en un lapso de 20 minutos de las instalaciones que posee la empresa brasilera Quickfood en Fondo de La Legua al 1600.
«Un juez dio una orden de desalojar, vinieron infantería y gendarmería nos dieron 20 minutos para desalojar», explicó el delegado de la comisión interna, David Soria. En tanto, el Ministerio de Trabajo de la provincia de Buenos Aires informó que este miércoles al mediodía se realizará una audiencia de conciliación.
Los operarios de Paty habían iniciado la protesta el domingo pasado ante la posibilidad de que la compañía cierre sus operaciones y traslade toda la producción a San Jorge, Santa Fe.
La empresa reconoció que por el traslado de la fábrica la empresa abonará una «gratificación adicional» que consistirá en el equivalente a los «rubros indemnizatorios más un porcentaje adicional y otorgará el beneficio de la extensión de la cobertura de la obra social».
Además, aseguró que se ofrecerán «potenciales traslados» a los colaboradores de la compañía. La planta ubicada en Martínez no forma parte de los activos de la compañía y Quickfood la utiliza bajo contrato de locación.
Por esto, aseguran que el traslado a San Jorge, provincia de Santa Fe, le permitirá «fortalecer su operación en la Argentina y alinear el negocio sobre una estructura más eficiente y competitiva».