Eduardo López, también secretario Gremial de la Confederación de Trabajadores de la Educación (Ctera), denunció que a un mes del inicio del ciclo escolar «no hubo aún un llamado a paritarias».
Además, el dirigente docente porteño explicó que la convocatoria a la paritaria nacional docente «no es una concesión graciosa del ministro de Educación, Esteban Bullrich, quien no puede decidir según su antojo, sino un mandato determinado por la ley».
López señaló de esa forma lo que determina la Ley de Financiamiento Educativo de 2005 que, en su artículo 10, sostiene la obligación de convocar a las negociaciones paritarias.
«Esa ley es incumplida en lo salarial, ya que el Gobierno redujo la inversión en educación, a pesar de que la norma la fijó en un piso del 6 por ciento», dijo el dirigente, quien agregó que «el presupuesto también está en riesgo, porque la norma prevé la universalidad de la sala de cinco años, la obligatoriedad de la secundaria, la ampliación de la jornada completa y el fortalecimiento de la educación técnica», puntualizó López.
El gremialista reclamó además «el mejoramiento de la formación docente» y explicó que ello depende del «financiamiento nacional y de que el Gobierno libre o no a las provincias a su suerte al negarse a fijar el piso salarial y la compensación a determinadas regiones».
Por último, aseguró que la paritaria nacional «es necesaria para luego abrir las discusiones provinciales y acordar a partir de un piso los salarios de las restantes categorías y cargos».