La entidad, compuesta por 45 organizaciones sindicales, destacó que en marzo «las mayores subas inflacionarias se dieron en el ámbito de la educación con un 7,7 por ciento, impulsada por las nuevas cuotas de colegios privados».
Por su parte, «Indumentaria y calzado» escaló a 4,8 por ciento y «Vivienda y sus servicios» 4,5 por ciento, debido al » aumento de la tarifa eléctrica en el AMBA (Edenor y Edesur) y la de Mendoza que subió a 40 por ciento».
«Si tomamos el promedio de 2017 en comparación con el de 2016, veremos que la inflación del decil de menores ingresos (decil 1) fue de 31,2 puntos porcentuales contra el 25,8 del decil más alto (decil 10)», indicó el IET, que atribuyó esa diferencia al «gasto generado por el aumento en servicios públicos».
El informe, también reporta que «el salario real de los asalariados formales desde noviembre de 2015 y en lo que va de los 16 meses del gobierno de Cambiemos, tuvo una reducción en 6,3 por ciento».
El rector de la Universidad Metropolitana para la Educación y el Trabajo (UMET), Nicolas Trotta, aseguró que «las cifras demuestran que la inflación no se desacelera y sigue golpeando con más severidad a los sectores populares».
«Estos números entierran cualquier instancia de cumplimiento de la meta inflacionaria del gobierno y reafirman la pérdida de capacidad de compra del salario», señaló Trotta.
En la presentación del índice de marzo estuvieron presentes Rodolfo Daer (Alimentación), Víctor Santa María (SUTERH), Hugo Yasky (CTA), Horacio Ghilini (SADOP), entre otros dirigentes.