Nos critican a todos por el abuso que hace un grupo reducido de compañeros sindicalistas que proponen “dar vuelta taxis”, que intentan “cerrar estaciones de servicio” o que “amenazan de muerte a compañeros que defienden intereses diferenciados” como nos hizo Héctor Daer a los farmacéuticos y bioquímicos.
«Por suerte estas prácticas mafiosas se concentran en unos 100 dirigentes sindicales sobre 75000 existentes en el país; pero, como el mal ejemplo cunde y tomó estado público, urge una reingeniería interna que impida y condene los excesos: exigir paritarias sin techo y decidir medidas de fuerza, SÍ; mandar a quemar autos, cerrar comercios o amenazar de muerte a compañeros, NO», explicó el gremialista.
Además losculpó de prácticas «que impiden a jóvenes dirigentes crezcan, acordar salarios a la baja con la patronal, o dejar sin trabajo a compañeros opositores. Debemos cambiar de comportamiento, no de modelo sindical, que es ejemplo en el mundo, por su organización y solidaridad».
«Si no defendemos el modelo sindical argentino, autocorrigiendo nuestros defectos y excesos, nos corregirán de prepo», agregó Peretta quien se refirió a la Resolución ministerial “recomendando” voto electrónico, cupo femenino y candidatos no procesados, o, incluso, a la “ley Mucci reciclada” que está en carpeta.
«Los nuevos sindicalistas debemos dar ejemplo. Vienen tormentas, dejemos de ponernos bronceador», concluyó.