En el documento que difundió la conducción del Partido Justicialista en el plenario del jueves pasado, los dos ejes fueron la posición argentina ante los holdouts y el repudio al linchamiento mediático a propósito del procesamiento de Amado Boudou. Esto fue después de que la comisión de juicio político, con mayoría oficialista, rechazara el pedido de juicio político contra el vicepresidente.
En el primer plenario de la nueva conducción del Consejo Nacional del PJ, que fue encabezado por su titular, el gobernador jujeño Eduardo Fellner, y por el resto de las autoridades partidarias, los congresales repudiaron «el linchamiento mediático y el intento de aprovechamiento político que la oposición y sectores económicos concentrados realizan sobre la situación judicial del vicepresidente de la Nación, Amado Boudou».
Antonio Caló, el líder de la CGT convalidó en una entrevista reciente la postura del partido, del cual es vicepresidente segundo, aunque tampoco brindó un apoyo personal a Boudou.
“Un procesado no es un culpable”, afirmó, aunque tampoco mostró un apoyo demasiado enfático hacia el ex ministro de Economía. “Si la Justicia lo encuentra culpable, Boudou sabrá lo que tiene que hacer”, sostuvo Caló.
Además, la Confederación General del Trabajo no se pronunció institucionalmente al respecto. Tampoco lo hizo la CTA conducida por Hugo Yasky, aunque también acompaño con su presencia el apoyo brindado por la Presidenta a su vice, durante el acto oficial por la el Día de la Bandera en Rosario. Se trató de un apoyo simbólico, con un saludo afectuoso en público. El mismo Yasky compartió un saludo con el vice durante el acto.