La protesta se inició a las 8 mañana de ayer con un corte total de la ruta que se extendió durante todo el día.
El sindicato reclama que se revierta la situación de 300 zafreros que quedaron desafectados de la cosecha y por un “resguardo de las condiciones laborales de todos los trabajadores”, añadió.
En ese marco, rechazaron la «nueva modalidad» implementada por la empresa y pidieron que se aplique el régimen de zafra, cuando personal de planta y temporario presta funciones en las cosechas a cambio de un adicional durante los seis meses de molienda.
“Habíamos anunciado que se iban a profundizar las medidas de fuerza debido a que no hemos recibido ninguna solución a nuestros pedidos”, explicó Juárez, quien agregó que “nada ha cambiado desde el primer día”.
En relación al reclamo por la continuidad laboral de los 1080 trabajadores del ingenio, Juárez explicó que «hay un instrumento público firmado en enero que garantiza las fuentes de trabajo, esto está ratificado, no está en discusión».
Desde el gobierno provincial, por su parte, afirmaron que están dispuestos a retomar las conversaciones con el sindicato pero lo condicionaron a que se levante la medida de fuerza y que prosiga la zafra azucarera, iniciada el 30 junio.
El ingenio La Esperanza atraviesa un proceso de venta en el que hay un solo grupo inversor interesado que pretende sostener sólo «600 puestos de trabajo», según lo informado la semana pasada por el gobernador de Jujuy, Gerardo Morales.
Ante ese panorama, el mandatario advirtió que «es eso o se liquida el ingenio» y quedan «todos los trabajadores fuera».
El ingenio La Esperanza, ubicado en el este de Jujuy y bajo control del Estado jujeño, fue declarado en quiebra y transita un proceso de reorganización con un plan de «retiros voluntarios» y de traslado de parte de la planta de trabajadores a otras instituciones estatales.