Las multitudinarias movilizaciones contra la Reforma Previsional siguen dejando consecuencias. Ahora se trata de una veintena de despidos a trabajadores metalúrgicos de Morón, que se plegaron a la medida de fuerza de la CGT y marcharon con su seccional de la Unión Obrera Metalúrgica (UOM) al Congreso.
Agustín Colovos, delegado de la UOM de Moron, dialogó ayer con Radio Gráfica y ratificó que la decisión de la firma fue a causa de que los operarios participaron de la marcha contra la reforma previsional en diciembre.
«Hoy decidimos parar la producción y quedarnos en la puerta junto a los despedidos hasta que los reincorporen», explicó Colombo sobre la respuesta del gremio metalúrgico, que recibió amplia solidaridad gremial.
«Lo que es desmedido es el operativo de la policía de infantería de la bonaerense», añadió Colombo. Sucede que en la puerta de ingreso de la planta se apostaron 12 camiones de la Guardia de Infantería para «amedrentar» a los empleados.
«No es un problema de falta de trabajo sino de disciplinamiento» aseguró el dirigente. «Nosotros nos hacemos respetar y la patronal envalentonada con la ola amarilla toma estas decisiones», sentenció.
Además recordó que la UOM «el 18 cumplimos a rajatabla con el paro de la CGT y fuimos reprimidos». Esa situación, que contrastó con la reacción de otras organizaciones de la central obrera, fue el detonante para la salida del gremio de la conducción de la CGT que se cristalizó con la renuncia de Francisco «Barba» Gutierrez a la secretario del Interior.