Luego de la populosa asamblea que realizaran trabajadores y vecinos de Rio Turbio el pasado miércoles empezaron a llegar mas telegramas de despido y cerca de 300 gendarmes a la zona de las minas para configurar un escenario que no es ajeno a la memoria del pueblo santacruceño puesto que en los 90 también hubo un intento de cierre y vaciamiento de las minas por parte del gobierno nacional.
El intendente Perez Osuna, orador en esa asamblea, expresó dramáticamente que: «… Espero que todos los presentes acompañen para que se pueden ejecutar todas las acciones. Nosotros también hemos decidido acompañar en la reunión que se va a concretar lunes y martes en Buenos Aires estaremos en los medios nacionales explicando qué está pasando acá, porque vienen por todos nosotros, eso lo habíamos adelantado, qué el gobierno iba a venir a despedir gente y no nos habíamos equivocado. Dijeron que estamos haciendo política por las elecciones, y hoy todo lo que dijimos hace 2 años atrás se está cumpliendo…Se beneficia a los grandes empresarios, se achica el presupuesto, les dan beneficios a las mineras de millones de dólares. Con eso podemos solucionar todos los problemas de la mina .Esto no es una cuestión de pensamiento, peronista, radical, de ningún partido, acá vienen por todo. Entonces hay estar unidos. A veces te intenta desligitimar lo que pide la parte gremial con distintas cuestiones, pero tenemos que estar unidos con la gente que es el único respaldo. Hay que apoyar a la conducción gremial. Se debe apoyar sólo lo que propongan sus propios delegados y tener un acompañando permanentemente”.
Por su parte, secretario adjunto de APS, Oscar Sánchez, remarcó que se va “a fortalecer esta lucha” e invitó a las comunidades de la Cuenca Carbonífera a participar de la vigilia que los trabajadores van a realizar en la mina hasta el próximo martes a la espera de definiciones por parte del gobierno nacional.