A días del inicio de las negociaciones salariales con el gobierno provincial, el Frente de Unidad Docente sufrió una baja importante. La seccional bonaerense de la Unión de Docentes Argentinos (UDA) rompió ese bloque de poder -controlado por Subeba y la FEB- para negociar de manera individual en la paritaria.
Si bien se trata de un gremio minoritario, la salida de UDA marca un peligroso precedente para los gremios en el arranque la discusión por salarios. Es que el Frente de Unidad Docente fue un núcleo de poder que se mantuvo inalterable durante toda discusión salarial del año pasado, que incluyó 148 días de duras negociaciones y 17 medidas de fuerza.
El frente estaba conformado por Suteba, la FEB, UDocBA, UDA, los técnicos de AMET y los privados de SADOP. Ahora -sin UDA- ese bloque gremial quedó con cinco gremios. De todos modos, los que cuentan con más votos en el esquema de paritaria son Suteba y la FEB.
Y es allí justamente donde germinó el malestar de UDA: en el trato de Roberto Baradel (Suteba) y Mirta Petrocini (FEB) hacia los sindicatos más chicos. Según consigna la web Info7Días, en el gremio se «cansaron» de que Baradel y Petrocini «se corten solos» y «no sean orgánicos» con el resto de los secretarios generales.
En el esquema actual de negociación paritaria, la salida de UDA del Frente no significa un problema para el tandem Baradel-Petrocini. Y aún si otros gremios minoritarios siguieran los pasos de UDA, Suteba y la FEB tienen votos suficientes como para controlar la negociación.
Mientras tanto, el gobierno provincial sonríe y ultima detallas antes de citar a los gremios a la primera reunión formal para negociar un esquema salarial para 2018.