«Es un paro contundente y fracasó el intento de meter miedo para que la gente no pare», señaló a Télam el líder del Sindicato Único de Trabajadores de la Educación de Buenos Aires (Suteba).
«Si un pequeño porcentaje de maestros va a trabajar es por miedo a los descuentos», puntualizó.
El sindicalista sostuvo que «este es un gobierno que desprecia a los docentes y a la escuela pública y niega el diálogo permanentemente».
Insistió en que la huelga, que impide el normal comienzo del ciclo lectivo 2018 en las casi 16.000 escuelas de la provincia, se debe «la falta de una paritaria nacional».
«En la provincia nosotros tendríamos que haber iniciado las conversaciones en diciembre, pero a último momento nos convocaron para hacernos tres ofertas idénticas y no se mueven de eso», dijo.
Además insistió en que parte del reclamo es porque el sector docente no quiere «perder poder adquisitivo» en momentos en que «el gobierno ofrece 15% o nada».
Los sindicatos de docentes piden «20% de aumento con cláusula gatillo y un 4% por la pérdida de poder adquisitivo del año pasado», recordó
También afirmó que durante el fin de semana «no hubo contactos» con referentes del Gobierno, aunque «igual» el sindicato apuesta «a que haya diálogo y a que esta situación se pueda resolver».
El paro por 48 horas fue convocado la semana pasada para todo el país por la Confederación de Trabajadores de la Educación de la República Argentina (Ctera), de la que forma parte el Suteba.
Fuentes del gobierno bonaerense señalaron que las escuelas «estarán abiertas y se brindará el servicio de comedor escolar», a la vez que recordaron que se descontarán a los docentes los días de huelga que realicen.