Uno de los titulares de la CGT, Juan Carlos Schmid, reiteró que el ciclo del triunvirato que conduce la central obrera «está agotado», pero consideró que «tampoco se puede dar un portazo y mandarse a mudar», en una clara alusión a la decisión del titular del sindicato de Camioneros, Hugo Moyano, quien retiró a su organización de la central obrera.
«Manifesté en más de una oportunidad mi alineamiento con las posturas de Moyano y estuve en el acto que organizó el 21 de febrero. No reniego de eso. Tampoco hay que olvidar que dije en diciembre que el ciclo de esta conducción está agotado. Pero no nos podemos mandar a mudar, pegar un portazo y tirar la llave por la ventana», señaló Schmid en declaraciones a Radio Mitre.
Ayer, Pablo Moyano formalizó su salida de la secretaría gremial de la CGT porque la conducción de la central sindical «no representa hoy los intereses de los trabajadores».
Las declaraciones de Schmid se conocieron mientras referentes de las diversas corrientes que nuclean a los gremios más numerosos, como los denominados «Gordos», Independientes, Energéticos, del Movimiento de Acción Sindical (MASA) y las 62 Organizaciones compartían un almuerzo en un sindicato del barrio de Boedo, en un intento por normalizar la CGT, pero sin la presencia de Moyano ni del gastronómico Luis Barrionuevo.
Schmid aseguró que la central que representa a las organizaciones de trabajadores más importantes del país «debe llamar a un congreso normalizador para elegir nuevas autoridades».
«Es lo que realmente pienso, y aclaro que no estoy cooptado por ningún sector sindical, político y no tengo nada que ver con las decisiones y los armados del cristinismo», apuntó.
En relación al futuro sindical y político que tomará Moyano, Schmid evaluó que «es muy difícil» que el camionero pueda repetir una experiencia por fuera de la CGT como fue la del Movimiento de Trabajadores Argentinos (MTA) en los ’90.
«Los actores sociales hoy son distintos. Moyano lideró esa experiencia con Juan Manuel Palacios de la UTA y (Carlos) ‘El Perro’ Santillán. Hoy eso es imposible. Sigo creyendo que el movimiento obrero debe articular con los movimientos sociales, porque hoy son los pobres los que están en las calles», subrayó.