«Hoy se hace esta marcha porque es el cierre definitivo de Ferrobaires y nos movilizamos también para presentar en Gobernación un escrito pidiendo la reapertura de ramales, ya que hay 104 pueblos sin trenes», expresó a Télam Alfredo Fornaro, supervisor general de Ferrobaires desde hace 20 años e integrante de Unión Ferroviaria, Lista Bordó.
Remarcó que «este gobierno no le interesa el tren de pasajeros, solo quieren el de carga. A muchos compañeros les llegó el telegrama de despido en estos días, a mí todavía no me llegó. Yo mañana si no me llega el telegrama voy a trabajar como si nada aunque no exista más Ferrobaires».
Ayer se concretó la disolución formal de Ferrobaires, tal como dispuso por decreto del 22 de enero último la gobernadora María Eugenia Vidal.
Ante ese hecho, gremios ferroviarios, organizaciones sociales y políticas marcharon hasta la Casa de Gobierno bonaerense, en La Plata, para visibilizar el conflicto de los empleados despedidos y también para pedir por la vuelta del servicio en los lugares en los que aún continúa suspendido.
Maximiliano Jensen, coordinador del espacio político Libres del Sur, precisó a esta agencia que «hoy hay una inmediatez que tiene que ver con el cierre de Ferrobaires pero también reclamamos que el Estado no concibe al sistema ferroviario en su integridad, no es sólo el trabajo que es lo inmediato, es la falta de plan estratégico en cuanto a todo el sistema».
«Un país sin trenes, es un país sin futuro: Todo país moderno y desarrollado tiene como política de Estado la industria ferroviaria, ya que este medio de transporte es el más seguro y menos contaminante que existe», sostienen desde la agrupación, que ayer junto a la ONG VIAS (Verificación Informativa y Auditoria Social), realizaron relevamiento destinado a conocer el estado de los trenes de pasajeros del área metropolitana.
Para Jensen, «deberían considerar el sistema ferroviario como sistema de desarrollo y de transporte público, ágil, dinámico y que conecte todo el territorio, un sistema de transporte publico ligado a medio ambiente, y también tener en cuenta el cuidado de la vida, ya que el 30% de las muertes por tránsito en el país que ocurren en la provincia de Buenos Aires por el estado de las rutas», agregó.
También remarcó que, según datos que maneja su espacio, quedaron «unos 1.500 trabajadores sin empleo», e informó que, hasta hace unos días, muchos empleados seguían recibiendo telegramas de despido.
De la marcha participaron representantes de Unión Ferroviaria; el diputado del PTS-Frente de Izquierda, Nicolás Del Caño; el diputado provincial del Partido Obrero, Guillermo Kane; empleados del Tren Belgrano Norte, del Tren Sarmiento, y trabajadores de Bahía Blanca, Tandil, Bragado; trabajadores nucleados en la CTA; el Partido Obrero, la Izqueirda Unida y la organización Barrios de Pie.
En esa línea, agregaron que «hay una gran cantidad» de personas en condiciones de jubilarse y por eso es que también tomó intervención en el asunto Anses.
En tanto, desde el área de Transporte indicaron sobre los destinos suspendidos que «se están evaluando las condiciones del ramal, con foco en la seguridad, que es el eje prioritario de un servicio de transporte de calidad ara trenes de pasajeros.