La Confederación Argentina de Trabajadores del Transporte (CATT), que encabeza Juan Carlos Schmid, parece empezar a salir del letargo. En los últimos días expresó su “repudio al constante incremento de tarifas” de los servicios públicos, a través de una pegatina de afiches por el centro porteño con la frase «Maldito tarifazo».
“El gobierno quiere imponer un techo del 15% a las negociaciones paritarias, cuando el aumento de la canasta básica ya ha superado esa cifra en lo que va del año, y el de los servicios básicos ha llegado hasta un 1.350 por ciento”, expresó Schmid en un comunicado de prensa.
Según informaron desde la CATT, la pegatina de afiches forma parte de una serie de acciones públicas que realizarán en contra de los aumentos de las tarifas.
“Millones de argentinos padecemos, más que un ajuste económico, un verdadero estrangulamiento de nuestras condiciones de vida. Su fruto se destina a enriquecer a sectores amigables del poder, como las mineras, el juego y las finanzas, que se han beneficiado de quitas de retenciones y la desregulación de sus actividades”, manifestó Schmid.
El triunviro de la CGT señaló que “se ejerce una insostenible presión directa contra los trabajadores y sus organizaciones, se incumplen compromisos públicos como la eliminación del Impuesto a las Ganancias sobre los salarios y se siguen acumulando abultadas deudas con nuestras obras sociales”.
Además, señaló que la reorganización de la CGT “debe ser el paso indispensable para la respuesta orgánica, frente al proceso de luchas que consideramos inevitables si el gobierno persiste con un programa económico cuyo horizonte son más y peores medidas a las que ya se han adoptado en perjuicio del trabajador, del pueblo y de la patria”.
Más tarde, en conmemoración del 1° de mayo criticó duro al Gobierno y pidió la unidad del Movimiento Obrero. “En este Primero de Mayo, la CATT manifiesta que la reorganización de nuestra CGT, con todos los sectores del Movimiento Obrero, debe ser el paso indispensable para la respuesta orgánica, frente al proceso de luchas que consideramos inevitables si el gobierno persiste con un programa económico cuyo horizonte son más y peores medidas a las que ya se han adoptado en perjuicio del Trabajador, del Pueblo y de la Patria” señalaron en el texto titulado “Unidad para Organizar la Lucha”.
“El gobierno quiere imponer un techo del 15% a las negociaciones paritarias, cuando el aumento de la canasta básica ya ha superado esa cifra en lo que va del año, y el de los servicios básicos ha sobrepasado hasta un 1350 por ciento”, denunciaron, agregando que “la caída del empleo y la pérdida de poder adquisitivo del salario van de la mano con el cierre de fábricas, empresas de servicios y comercios, la destrucción de las economías regionales y el deterioro del mercado interno generada por una espiral inflacionaria que no se detiene”.
En esta línea, desde la CATT no olvidaron el presente de la tercera edad: “La desprotección a nuestros mayores, con jubilaciones y pensiones de hambre, se agrava con el cercenamiento de beneficios y medicamentos por parte de la ANSES y el PAMI, al mismo tiempo que se ejecuta una desvergonzada transferencia del ahorro de nuestros jubilados para saldar las anomalías presupuestarias de algunas administraciones provinciales”.
“Millones de argentinos padecemos, más que un ajuste económico, un verdadero estrangulamiento de nuestras condiciones de vida. Su fruto se destina a enriquecer a sectores amigables del poder, como las mineras, el juego y las finanzas, que se han beneficiado de quitas de retenciones y la desregulación de sus actividades”, remarcaron desde la CATT, enfatizando en el incumplimiento de la promesa de campaña de eliminación del Impuesto a las Ganancias sobre los salarios y señalando las “abultadas deudas con nuestras Obras Sociales”.
Asimismo, manifestaron que “se agudiza la crisis de representación política que nos afecta hace tiempo, favoreciendo a quienes descreen de la democracia e intentan salidas corporativas” y denunciaron que “se intenta transformar al ciudadano en consumidor de fantasías publicitarias, para deteriorar su condición de “sujeto de cambio” y reducirlo a mero espectador”.
Desde la central sindical del transporte finalizaron destacando “la madurez y la responsabilidad de nuestra organización, condiciones que ha demostrado promoviendo y generando el diálogo indispensable en una democracia adulta; actitud que no ha sido correspondida efectivamente por el Poder Ejecutivo”.