La denuncia la hizo la secretaria general de la seccional provincial de esa organización, Marcela Urban, que los castigos son para amedrentar a los docentes y evitar que peleen por sus derechos.
Un comunicado firmado por Urban y el secretario de Comunicación y Prensa nacional, Gerardo Alzamora, indicó que «los docentes son trabajadores de la educación pública de gestión privada, pero es cada vez más evidente que se trata de docentes privados de los derechos a reclamar salarios o condiciones laborales, a protestar o a agremiarse».
Urban agregó que hay docentes afiliados que no adhieren a los paros por temor al despido y, otros, «ni siquiera se atreven porque la patronal los identifica y advierte directa o indirectamente que serán sancionados y, si son suplentes, que no serán contratados”.
La dirigente denunció que algunas patronales ya cesantearon trabajadores por «el solo hecho de escucharnos y difundir luego sus derechos laborales», y confluyó afirmando que también «se despide o sanciona al personal que se propone como delegado”.