A horas del comienzo de las vacaciones de invierno, la Justicia le ordenó al Gobierno de María Eugenia Vidal que convoque a los docentes a una nueva reunión paritaria. La medida cautelar la dictó el Tribunal de Trabajo N° 1 de La Plata a partir de una presentación del Frente de Unidad Docente.
La última reunión paritaria que convocó el Gobierno provincial fue el 20 de abril. Entonces, rechazaron la propuesta oficial, que fue de un 10% en el primer semestre con revisión en julio más $ 3.000 de presentismo también en los primeros seis meses.
Sin llegar a un acuerdo, la administración Vidal comenzó a pagar un adelanto a cuenta a los docentes, pero nunca los llamó para sentarse a discutir, ni con los chicos en las aulas, ni con paros.
Al no retomarse las negociaciones, los gremios docentes fueron a la Justicia para exigir que el Gobierno vuelva a convocarlos. Y anticiparon que podrían convocar a un paro para el lunes 30 de julio, cuando se retome el ciclo lectivo luego del receso escolar de invierno.
El fallo de los jueces Mauricio Bordino, Stella Maris Marcasciano y Víctor Hugo Guida ordena al Ministerio de Trabajo provincial que en un plazo de cinco días «proceda a la reapertura de la negociación sobre el reajuste salarial de los empleados docentes para el año en curso y convoque a las partes –Federación de Educadores Bonaerenses ‘Domingo Faustino Sarmiento’; Sindicato Argentino de Docentes Particulares; Sindicato Unificado de Trabajadores de la Educación de Buenos Aires; Asociación del Magisterio de Enseñanza Técnica, y la Unión de Docentes de la Provincia de Buenos Aires y el Estado Provincial-, quienes deberán concurrir y negociar en un marco de buena fe, tal y como lo manda la norma contenida en el artículo 11 de la ley 13.552, para dar continuidad a la mesa de negociación salarial docente, bajo apercibimiento de disponerse la aplicación de sanciones conminatorias –las que serán graduadas oportunamente- en caso de incumplimiento».
El último encuentro de las autoridades con los gremios fue justamente la de abril. Entonces, Vidal cambió la oferta original, que era de un aumento interanual del 15%. Los gremios, ya en el arranque de la negociación a principios del año escolar, exigían una suba del 25% con cláusula gatillo.
En su resolución, los jueces destacan que «al momento de tomar la presente decisión, el país se encuentra sumido en una situación de crisis económica cuyas consecuencias han de repercutir necesariamente –entre otros aspectos- en los salarios de los trabajadores» y por eso remarcan que considerando que la última reunión paritaria fue el 20 de abril «en el actual contexto económico» se «torna necesario mantener activas las negociaciones paritarias con las asociaciones profesionales peticionantes».