Trabajadores de la aplicación Rappi protestaron ayer frente a las oficinas de la firma por los permanentes cambios en las condiciones de trabajo que les impone. Durante una concentración que realizaron en la calle Castillo al 1200, en el barrio de Palermo, reclamaron además por un salario fijo, algo que se les niega.
«Pedaleamos más y ganamos menos»; apuntaron a la agencia La Cartelera de Trabajo. Casualmente, o no tanto, la protesta coincidió con una huelga que los trabajadores de Amazon comenzaron por condiciones de trabajo del otro lado del Océano Atlántico. Todo un signo de época.
#AHORA 🛵🚴🏽♀️Por primera vez en la Argentina hay una huelga de trabajadores de plataforma. Los repartidores de la app de envíos @RappiArgentina se manifiestan ahora en la sede de la empresa. pic.twitter.com/RxgneOtafS
— La Cartelera de Trabajo (@carteleralct) 16 de julio de 2018
Una de las claves de las quejas de los trabajadores es que la firma impuso un cambio en las condiciones laborales que se centra en pagarles más a los que recién ingresan al sistema y reducir los pagos a los que están hace más tiempo.
Para calmar la protesta, la empresa recibió a algunos representantes elegidos informalmente por los trabajadores que reclamaban, pero al mismo tiempo aplicaron una suba en los pagos de la jornada de ayer, con el fin de desarmar las quejas y dividir a los empleados.
“Con la nueva actualización los chicos nuevos tienen mucho trabajo, y los que estamos hace mucho tiempo nos salen los pedidos de 3 o 4 kilómetros. Estoy en Palermo y me llega un pedido para ir a Caballito. Sé que son más de cincuenta cuadras porque me lo marca la aplicación. ¿Voy pedaleando hasta allá por $35? Si no tomo el viaje me llaman para presionarme. Luego me bajan el ranking y no me llegan más pedidos”, manifestó uno de los mensajeros.
En las capacitaciones, la empresa se compromete a determinadas condiciones de prestación, que luego son modificadas: “Cuando fui a la capacitación, te ponían un mapita que decía que el viaje no era de más de 1.5 kilómetros. Ahora los pedidos salen de 3 kilómetros. Y a veces te aparecen viajes que dicen 0.0 km y abrís y ves que es de 4 km, y lo tenés que tomar o quedarte bloqueado” relató otro de los trabajadores afectados a la protesta.
Durante la huelga, Rappi aumentó los pagos a repartidores de $35 a $60 por viaje para ahogar la protesta. Las tarifas y pagos son variables y las fija unilateralmente la empresa. “Por el motivo de la huelga subieron el porcentaje de envío a cincuenta pesos pero esta tarde nos empezaron a mandar, mensajes que el envío iba a estar a sesenta pesos, están pagando mejor porque se enteraron que nosotros íbamos a hacer esto” manifestó otro rappitendero.
¿Cómo se ejerce el control sobre los repartidores? Si no aceptan un pedido porque están descansando o no desean tomarlo les bajan el puntaje, el cual depende de la tasa de pedidos tomados y de la calificación de los clientes. Además cuando rechazan pedidos les pueden bloquear la aplicación durante una hora.
En todo este marco de explotación laboral, cuando la firma se enteró de la protesta que estaban comenzando sus empleados, los criticaron por lo que describieron como «hacer sindicalismo».