El Gobierno elevó el piso y bajó el techo para poder acceder al cobro de las asignaciones familiares. También eliminó los beneficios zonales que alcanzaban a más de 100 mil chicos de provincias de la Patagonia y algunas zonas del Norte.
Se trata del Decreto 702 que fue publicado este viernes en el Boletín Oficial y comenzará a regir a partir de septiembre y que implica un gran ajuste en las políticas sociales.
Con esta medida, la administración de Cambiemos achicó el techo o tope máximo de ingresos aplicables a los beneficiarios de asignaciones familiares, que bajó de $ 94.786 actuales a $ 83.917. Pero además, la nueva normativa aclaró que si uno de los integrantes del grupo familiar tuviera un ingreso superior a los $ 41.959, quedará excluido del cobro de las asignaciones.
Con el decreto hay un nuevo piso de ingresos para recibir la asignación familiar: de $200 pasa a ser $2.816.
Otra de las disposiciones es «equiparar» el valor de las asignaciones familiares en todo el país y de ese modo las personas de las zonas en las que se percibían beneficios pasarán a cobrar menos de la mitad.
Hasta ahora, el monto general era de $1.578 para los trabajadores en relación de dependencia con salarios más bajos y ascendía a entre $3.155 y $3.407 para los registrados en Chubut, Santa Cruz, Tierra del Fuego y departamentos de Catamarca, Jujuy y Salta, entre otras zonas.
Según explican desde el Gobierno se trata de una medida para «formalizar el trabajo» y «evitar aviavadas» por lo que se cruzarán datos de Anses y AFIP, y se contactarán a las empresas en las que se presenten irregularidades.
Desde la Casa Rosada aclararon que en el caso de los hijos con discapacidad no se modificarán los diferenciales por zonas.
El impacto llega sobre uno de los reclamos que la CGT levantaba hace un tiempo y que era el eje de los paros que realizaba Azopardo hasta 2015.