El Ministerio de Trabajo aclaró que quienes percibían estas asignaciones en las zonas designadas cobrarán los montos de acuerdo con las escalas vigentes previas a la publicación del decreto que firmó el viernes último la vicepresidenta Gabriela Michetti.
«Durante este período se realizará una evaluación del alcance de la medida y los tiempos de implementación de la misma, con el objeto de seguir trabajando para alcanzar un Sistema de Seguridad Social más inclusivo y sustentable», señaló la cartera que conduce Jorge Triaca.
La medida, que había desatado un generalizado rechazo de todo el frente opositor pero también de dirigentes de Cambiemos, eliminaba un régimen diferencial que alcanzaba a más de 100 mil chicos de provincias de la Patagonia y se diversas zonas pobres del norte del país.
Según informaron fuentes del Gobierno, la resolución se adoptó luego de una reunión en Casa Rosada entre el jefe de Gabinete, Marcos Peña y el ministro del Interior, Rogelio Frigerio, con dirigentes de Cambiemos de las provincias afectadas por el recorte.
El decreto de Michetti, ahora suspendido, también elevó el piso y bajó el techo de los salarios que debe tener un grupo familiar para cobrar asignaciones familiares, pero en este punto seguirá vigente y empezará a regir desde el primero de septiembre.
La disposición de la vicepresidenta eliminaba los beneficios extras que alcanzaban a más de 100 mil menores de provincias de la Patagonia y algunas zonas del noroeste del país, que cobraban más que el resto.
Por esas modificaciones, el valor de la asignación familiar por hijo podía llegar a caer entre 50 y 75% en algunas provincias, ya que los trabajadores registrados de Chubut, Santa Cruz, Tierra del Fuego y de departamentos de Catamarca, Jujuy y Salta iban a pasar a cobrar el «valor general».
Este monto por hijo se ubica en 1.578 pesos para el área metropolitana de Buenos Aires y la mayoría de las provincias, pero se incrementaba entre 3.155 y 3.407 pesos en los distritos diferenciales.