Una reunión de mesa chica de la central obrera sentenció ayer el rumbo que va a tomar la CGT en el futuro cercano. Es que los sectores que apuestan a la continuidad del triunvirato cerraron filas y sumaron aliados, con lo que se allanaron el camino para darle sobrevida al actual Consejo Directivo.
En el cónclave estuvieron los tradicionales integrantes del cuerpo más cerrado cegetista, Héctor Daer, Juan Carlos Schmid, Carlos Acuña, Andres Rodríguez, Armando Cavalieri, José Luis lingeri, Gerardo Martínez , Omar Maturano y Abel Frutos, pero también algunos aliados clave.
Es que se hicieron presentes Antonio Caló, para dar el aval de la UOM y Sergio Sasia para llevar el respaldo del Movimiento de Acción Sindical Argentino (MASA) que nuclea a la Unión Ferroviaria, Luz y Fuerza, Telefónicos, Taxistas y Personal Legislativo, entre otro conjunto de casi 40 sindicatos.
Con esa espalda, resolvieron convocar para el 29 de agosto el plenario de secretarios generales al que se había comprometido hace unas semanas y al que sólo faltaba ponerle fecha.
«La reunión fue corta porque era para fijar los detalles organizativos del plenario del 29 de agosto», señaló Schmid luego de la reunión. «Muchos sindicatos han pedido la re-apertura de paritarias y revisar las cláusulas de revisión. Seguramente muchos van a discutirlo», especifico el triunviro.
Las ausencias más notables fueron las de Hugo Moyano y los moyanistas, y la de los representantes de la Corriente Federal de Trabajadores, entre ellos el bancario Sergio Palazzo. Ambos espacios venían pidiendo un congreso para renovar autoridades y estaban tratando de sumar aliados para pedir un cambio en la conducción, que esté acorde con el lanzamiento de un plan de lucha.
Con el panorama como se presenta, el 29 el triunvirato estirará su conducción e incluso ganará en apoyos de quienes hasta ahora se mantuvieron al margen de participar de la vida de la CGT unificada.