En una jornada agitada en el mundo sindical, Camioneros confirmó que dejará la Secretaría Gremial de la CGT, lo cual fue comunicado por el dirigente Omar Pérez durante la reunión de Consejo Directivo que se realizó ayer en la sede de la calle Azopardo, donde se registró un tenso cruce.
«Prefiero caminar desnudo con la CTA que caminar con los funcionarios del FMI con sus trajes italianos», sostuvo «Manguera» Pérez ante el resto del Consejo Directivo, en clara alusión a las diferencias que los Moyano mantienen con otros referentes de la central en su posicionamiento frente al Gobierno.
En marzo pasado, Pablo Moyano había abandonado la Secretaría Gremial, pero designó a Pérez, de su gremio, como su reemplazante en el cargo, pero ahora Camioneros directamente dejará libre ese lugar-
Pérez asistió al encuentro acompañado por el abogado de Camioneros, «Huguito» Moyano, hijo del líder gremial, y justificó la salida del sindicato al alegar que no habían recibido suficiente solidaridad de parte de la CGT sobre la multa millonaria que el Gobierno les aplicó por supuestamente haber violado una conciliación obligatoria.
En paralelo, el gremio de los Moyano escribió en su cuenta de Twitter un agradecimiento a las dos CTA «por su apoyo frente a lo OIT (Organización Internacional del Trabajo) denunciando al Gobierno por la multa a Camioneros en defensa de los trabajadores».
Al retirarse de la reunión en Azopardo, Schmid sostuvo que ese argumento «no es verdad», ya que hubo un reclamo de la central «en la OIT y la CGT se pronunció oficialmente dos veces sobre ese tema».
Este episodio se produjo a solo dos días del plenario de secretarios generales de la CGT que se realizará este miércoles, al que Camioneros y gremios aliados aún no oficializaron si concurrirán.
Si bien Hugo y Pablo Moyano amenazaban desde hace meses con la ruptura y seguir adelante con la Multisectiorial 21-F (los sectores gremiales más opositores al macrismo y que están por fuera de la CGT, como las dos CTA), lo cierto es que el repentino anuncio dejó algo de sorpresa.
Ocurre que el triunvirato que integran Héctor Daer, Juan Carlos Schmid y Carlos Acuña estaba a punto de avalar, junto a los dirigentes moderados de los «gordos» y los «independientes», una nueva huelga general de la CGT para la segunda quincena de septiembre, lo cual podía servir para contener las exigencias de los Moyano de activar un «plan de lucha».
No obstante, Camioneros dio igualmente un portazo y ahora resta saber si la CGT de todas formas seguirán adelante con la posibilidad de ese paro, lo cual podría definirse este miércoles en el plenario que se realizará en un teatro porteño que pertenece a La Fraternidad.
«Es posible un paro en septiembre porque esta semana vamos a definir nuestros reclamos al Gobierno y todo indica que una vez más no vamos a obtener respuestas», afirmó el triunviro Acuña a un matutino porteño, mientras que anticipó que la agenda de demandas de la CGT a la administración de Mauricio Macri incluirá «un freno urgente a los despidos».
Por su parte, Camioneros en los próximos días deberá aclarar a la CGT si su alejamiento es sólo de la conducción cegetista o directamente dejará de ser un sindicato confederado de la central obrera, aunque esto último es poco probable.