Fuentes policiales revelaron que la medida se dispuso la semana pasada y tiene fines «preventivos por si los trabajadores intentan ingresar por la fuerza o por si se generan disturbios en la puerta» de los mismos.
La decisión se tomó luego de que la firma anunciara que «100 de sus 200 trabajadores serán reubicados», mientras que con el resto se quedará sin empleo.
En un principio trascendió que la orden a los oficiales de la fuerza porteña -sobre todo a los que se desempeñan en las comisarías- tenía que vinculación con ataques a supermercados relacionados con saqueos, pero finalmente se informó que tiene que ver con la venta de 12 locales pequeños de Walmart y Changomas, además del cierre definitivo de la sucursal que tenía la firma en el Dot Baires Shopping, explicó la agencia de noticias NA.
En ese sentido, a fines del mes pasado se oficializó que la empresa transfirió las 12 tiendas a la firma española Día, con la preservación de puestos laborales de 100 de los 200 empleados, ya que 50 van a ser relocalizados en otros locales Walmart de la Capital Federal o del Conurbano, mientras que otros 50 serán absorbidos por la firma compradora.
Asimismo, la empresa anunció que se abrirán los retiros voluntarios.
Sin embargo, hay otros 100 empleados que podrían verse complicados con su continuidad laboral, porque no la tienen garantizada.
Ante esa situación fue que se decidió custodiar o reforzar la vigilancia de donde están esas tiendas.
La orden a los distintos efectivos policiales se dio a conocer la semana pasada y continúa esta semana, aunque hasta el momento no hubo incidentes de ningún tipo.
Las sucursales que fueron vendidas están ubicadas en Avenida Rivadavia, Avenida Eva Perón, Cañada de Gómez, Cuenca, Avenida Juan Bautista Alberdi, Honorio Pueyrredón, Avenida Varela, Avenida Triunvirato, Nogoyá, Ramón Falcón, Avenida Cabildo y Avenida Crámer.